La presencia del presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, en Marruecos ha sacado de nuevo a la luz el conflicto entre Marruecos y el Sáhara Occidental, con el estado español de por medio. Medios marroquíes publicaban el pasado domingo que Sánchez había aterrizado en Marruecos con carácter "vacacional", hecho que ha suscitado las críticas del Frente Polisario, el movimiento político y militar del Sáhara Occidental. De hecho, las Naciones Unidas lo consideran como el representante legítimo del pueblo saharaui.
El Frente considera que legitima Marruecos
En una declaración de prensa del representante del Frente en el estado español, Abdulah Arabi, los saharauis consideran que con su llegada a Marrakech, Sánchez muestra "una vez más su apoyo a un régimen que vulnera de forma sistemática y diaria los Derechos Humanos del Sahara Occidental". En esta línea, el Frente Polisario denuncia que la prensa de Marruecos ha interpretado su estancia como un "apoyo absoluto a la ilegítima reivindicación mantenida por Marruecos sobre el Sáhara Occidental".
El Frente también recuerda que la Comisión Europea ha renunciado a su prerrogativa a negociar de nuevo los acuerdos con Marruecos, ya que están pendientes de que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea dicte las sentencias sobre los acuerdos entre la UE y Marruecos. Asimismo, el Frente opina que la elección de Sánchez de pasar sus vacaciones en Marruecos es lo único a lo que Marruecos "puede aspirar".
Recuerdan el cambio de postura de Sánchez
Los saharauis también recuerdan el cambio de postura de Sánchez con respecto a este conflicto —antes de marzo de 2022, el líder del PSOE mantenía la posición neutral que había caracterizado históricamente al estado español—. "Una nueva postura que fue rechazada por la sociedad civil española de forma inmediata", aseguran desde el Frente. Entonces, Sánchez firmó un acuerdo con Marruecos que enterraba la soberanía del Sáhara. Eso provocó malestar dentro del Gobierno, pero también creó una enemistad con Argelia, que suspendió el tratado de amistad y cooperación entre ambos países e impuso un bloqueo comercial en junio de 2022, que todavía se mantiene.
Sánchez no es el primer presidente español que escoge Marruecos para un periodo de vacaciones, ya que los expresidentes José Luis Rodríguez Zapatero y Felipe González lo habían hecho anteriormente.