El grupo de Sobiranistes de los comunes ha lamentado a través de un comunicado el cambio de ideario que ha realizado en su opinión Catalunya en Comú, "que aleja el partido de la centralidad del país". Además, indican, "liquida los valores fundacionales de los comunes".
El partido liderado por Joan Mena ha aprobado hoy mismo en el consejo nacional una hoja de ruta que incluye una constitución catalana en el marco plurinacional como vía para superar el actual marco estatutario. Es decir, una Constitución catalana pero dentro de España.
Eso, para los soberanistas críticos, supone la "desaparición de cualquier referencia a la construcción de una República Catalana y a la referencia de un proceso constituyente que tenga en su centro el derecho al ejercicio de la autodeterminación". La plataforma liderada por Elisenda Alamany y Joan Josep Nuet ha valorado que estos cambios "rompen con los valores fundacionales del partido", ya que no supeditaban la voluntad de la ciudadanía de Catalunya al Estado.
Los Soberanistes critican que en los últimos meses, desde los comunes se les haya rezumado una "cierta incomodidad" para hacer referencia al 1 de octubre. Y dan ejemplos: la oposición a posicionamientos en contra de la represión o críticos con la Constitución del 78" o la "resistencia por parte de un sector de la dirección a asistir a manifestaciones que pidan la libertad de los presos". Este cambio de rumbo, argumentan, no está a la altura de la situación actual del país y los aleja de ser "un proyecto de izquierdas ganador".
El ideario fundacional de los comunes
Explican los Soberanistas que Catalunya en común se fundó como nuevo sujeto político en Catalunya "convencidos de que el país necesitaba una nueva izquierda y un nuevo soberanismo". El ideario político que defendió Xavier Domènech el 8 de abril de 2017 justamente reivindicaba que Catalunya se encontraba semillas inmersa en el marco autonómico de un régimen "que va a la quiebra y que imposibilitaba la soberanía de Catalunya".
En la constitución del partido se apostó por la creación en Catalunya de una República Social, democrática y ambientalmente justa, "como máxima expresión y realización de su soberanía nacional".
Hoy, un año y medio después, los críticos han lamentado que la nueva dirección del partido haya aprobado "con urgencia y sin la participación del territorio" un nuevo ideario.
Alamany: "Tenía que representar otra manera de hacer política"
Elisenda Alamany, después de que los comunes hayan celebrado el consejo nacional de partido, ha compartido una reflexión en la red. "El nuevo proyecto de los comunes tenía que representar otra manera de hacer política. Eso para algunos, como yo, era innegociable e irregatejable", empieza su escrito.
Precisamente, explica la soberanista, porque durante años había vivido en primera persona las consecuencias de una "política alejada de la gente, tanto en forma como en fondo, construir una nueva política no era un capricho".
Alamany ha reiterado su desacuerdo en la nueva hoja de ruta del partido, que dice se aleja de "el ideario que contó con más de 40 talleres presenciales por todo el país, más de 3000 aportaciones, la col•laboració de más de 300 expertos en varias materias y el voto favorable de 5000 personas".
"Me entristece por todos los esfuerzos y sacrificios por parte de mucha gente para llegar aquí", concluye el comunicado.
"Personas por encima de la cúpula del partido"
Para los Soberanistas, el valor principal cuando se fundó el partido era que "la gente fuera protagonista no la cúpula del partido", una premisa que con la nueva dirección se ha perdido, aseguran.
El consejo nacional de Catalunya en común ha avalado este sábado el documento estratégico que marca la hoja de ruta con el 56% de votos a favor. El resto del voto ha quedado repartido entre el 19,5% que ha votado en contra y el 24% que se ha abstenido. El documento apuesta por una constitución catalana en el marco plurinacional como vía para superar el actual marco estatutario.
"Con la marcha del coordinador general [Xavier Domènech], y cuando|cuándo muchas de las caras visibles ya no sueño, la nueva dirección se apresura a cambiar el ideario con sólo 63 votos a favor", concluye la misiva. Los Sobirenistes auguran un futuro demoledor: "la situación es más preocupante ahora que cuando nació la plataforma Soberanistas". "La transparencia y el frescor|frescura que nos vio nacer han quedado liquidados hoy en una reunión y 63 votos favorables", sentencian.