La estrategia del PP de erosionar el gobierno de Pedro Sánchez aprovechando la crisis diplomática con Venezuela y la figura de Edmundo González ha tenido un revés cuando el mismo candidato a las elecciones presidenciales que se enfrentó a Nicolás Maduro ha salido públicamente a desmentir las acusaciones de los populares y negar que fuera coaccionado ni por el Gobierno ni por el embajador español, Ramon Santos, para suscribir el documento que permitió su exilio en España. "Ante las diversas versiones que circulan con respecto a una supuesta coacción ejercida por funcionarios del Estado español, incluyendo al embajador Ramón Santos, hacia mi persona, quiero aclarar de manera categórica el siguiente: No he sido coaccionado ni por el Gobierno de España ni por el embajador español en Venezuela. Las gestiones diplomáticas realizadas tuvieron como único propósito facilitar mi salida del país, sin ejercer ningún tipo de presión sobre mí". Las coacciones denunciadas por Edmundo González van dirigidas al régimen venezolano, al que acusa de haberlo coaccionado para firmar una carta en la que reconocía la victoria de Maduro. El gobierno venezolano ha contraatacado de nuevo este viernes, reiterando que el opositor firmó sin ningún tipo de coacción y que lo hizo bajo “un cierto tufo alcohólico”.
El documento firmado por González
La controversia surgió cuando González hizo público el jueves un vídeo en el cual denunciaba que mientras estaba refugiado en la embajada española, el presidente de la Asamblea Nacional (AN), Jorge Rodríguez y la vicepresidenta, Delcy Rodríguez, en una reunión que se produjo en la residencia del embajador de España, Ramón Santos, le obligaron a firmar un documento "bajo coacción" en el que dice acatar la decisión del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de validar el triunfo de Nicolás Maduro en las elecciones del 28 de julio. Esta carta fue mostrada en televisión por Jorge Rodríguez. El candidato opositor al régimen asegura que recibió "presiones inenarrables y amenazas extremas" del chavismo para obligarlo a firmar una carta en la cual González afirma que "siempre he estado y seguiré dispuesto a reconocer y acatar las decisiones adoptadas por los órganos de Justicia, incluyendo la precitada sentencia de la Sala Electoral (que convalidó el triunfo de Maduro en las urnas) que, aunque no la comparto, lo acato", dice la misiva, que fue exhibida por Rodríguez, que destacó la firma "voluntaria" de González.
Rodríguez contraataca
Rodríguez ha vuelto a aparecer públicamente en rueda de prensa este viernes, donde ha difundido grabaciones con las voces distorsionadas de la reunión en casa del embajador. El presidente de la AN aseguró que González demostró una cierta "desesperación" para irse de Venezuela a España "ese mismo día", ya que apareció vestido informalmente, y que firmó sin ningún tipo de coacción y bajo "un cierto tufo alcohólico". "No es otra cosa que una fuga de una determinada responsabilidad que él se arrogó a sí mismo y algunos venezolanos le alientan", remachó Rodríguez, en referencia a la salida del país de González. Además, en las grabaciones difundidas, se habla de la preocupación de que se proclamen gobiernos en el exilio y se escucha a González asentir al escuchar el caso de Dinorah Figuera, política venezolana que se exilió en España en 2018, perseguida por el régimen de Maduro y que en 2023 fue elegida presidenta de la Asamblea Nacional de Venezuela controlada por la oposición, en sustitución de Juan Guaidó. "Ir a proclamar un gobierno no está en la agenda de Edmundo", dice el interlocutor del opositor.
Se da la circunstancia, sin embargo, de que el mismo jueves, el Parlamento Europeo reconoce a Edmundo González como presidente legítimo de Venezuela después de una resolución impulsada por el Partido Popular Europeo, el grupo de Giorgia Meloni de los Conservadores y Reformistas Europeos (ECR) y del de Vox y Viktor Orbán, de Patriotas Europeos. Este reconocimiento se une al que hizo el Congreso de los Diputados el pasado 11 de septiembre a instancias del PP, que en cuentas de esta cuestión infligió la primera derrota del PSOE en este curso político, con el apoyo de Vox, PNV, Coalición Canaria y UPN. Junts no participó en la votación porque abandonó el hemiciclo para participar en los actos de la Diada, pero, en cambio, sí han avalado la misma iniciativa del PP cuando llegó al Senado.
Las acusaciones del PP
El partido de Alberto Núñez Feijóo ha querido seguir haciendo sangre e involucrar el Gobierno de estas coacciones que González denunció por parte del régimen del presidente Nicolás Maduro, aprovechando que la firma se hizo en la embajada de España a Caracas. Así, horas antes del comunicado del opositor venezolano, el vicesecretario de Institucional del PP, Esteban González Pons, aseguró que "el Gobierno de España" está implicado en lo que calificó de "golpe de Estado que se ha producido en Venezuela" y acusó al Ejecutivo español de "coaccionar y enviar al exilio" el "presidente electo" Edmundo González Urrutia, asegurando que "el Gobierno de España ha sido cooperador necesario". El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, también reclamó la dimisión del ministro de Asuntos Exteriores del Gobierno, José Manuel Albares, y le hizo cómplice de las coacciones del régimen de Maduro que recibió a Edmundo González. Feijóo, desde Roma, pidió también que el embajador de España en Venezuela, Ramon Santos, fuera "reemplazado" y que "el presidente del Gobierno de España tiene que dar explicaciones inmediatas y asumir que España no es equidistante entre la civilización y la extorsión y no sea equidistante entre la democracia y la dictadura". Feijóo acusó al Gobierno de Sánchez de "mentir", recriminó a la diplomacia española de estar al "servicio de un régimen dictatorial"
El "hooligan" González Pons
La respuesta del PSOE y el ejecutivo español a estas acusaciones fue contundente y exigió la dimisión inmediata de González Pons argumentando que sus palabras son incompatibles con la diplomacia y que podrían estropear las relaciones exteriores de España si llegara a ocupar un cargo diplomático. El partido socialista, en un comunicado, aseguraba que "es intolerable que el encargado de las relaciones internacionales del Partido Popular sea un hooligan el único problema del cual es la frustración de no haberse enterado de que Edmundo González estaba refugiado en la Embajada de España a Venezuela y sería acogido en nuestro país". El ministro José Manuel Albares exigió a Feijóo "que desautorice al eurodiputado que ha calumniado a España y acusa a España de cosas que son absurdas, pero tremendamente injuriosas para nuestro país", después de negar que el Gobierno estuviera implicado en cualquier tipo de coacción del régimen venezolano. "El embajador de España tenía instrucciones precisas de no inmiscuirse en la libertad de Edmundo González para poder hablar, gestionar, tener encuentros con quién él considerara", para que la decisión de que tomara "fuera la que él realmente quisiera, y por eso hablé personalmente con él", dijo Albares.