El pasado mes de diciembre parecía que todo estaba a punto para la exhumación de José Antonio Primo de Rivera, fundador de la Falange, sin embargo, el Ayuntamiento de San Lorenzo de El Escorial pudría encontrando trabas, según informe elDiario.es. El consistorio, en manos del Partido Popular, ha estudiado la petición de la familia para obtener las licencias necesarias para exhumar Primo de Rivera y ha pasado la pelota a Patrimonio Nacional.

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La familia de Primo de Rivera, que ya ha mostrado su predisposición a trasladar el cuerpo, presentó la solicitud para la exhumación el pasado 10 de octubre al ahora llamado Valle de Cuelgamuros y a la Comunidad de Madrid. La familia quiere que los restos de Primo de Rivera sean trasladados a un cementerio "sagrado", ya que con la nueva ley de memoria la zona pasa a ser un cementerio civil con la intención de resignificar el lugar.

Sin embargo, han pasado meses y la situación no avanzado. En diciembre, El Periòdico adelantó|avanzó que la licencia para la exhumación habría sido concedida, pero desde elDiario.es se apunta que el Ayuntamiento se habría puesto de perfil ante la petición de la familia afirmando: "El Ayuntamiento de San Lorenzo del Escorial no tiene competencia sobre la retirada de los restos cadavéricos". El digital también remarca que el consistorio ha mantenido silencio ante las peticiones de este.

No es la primera vez que el Ayuntamiento de San Lorenzo del Escorial tiene problemas con la gestión de las exhumaciones. El pasado miércoles, la alcaldesa del municipio, la popular Carlota López, declaró como investigada después de ser denunciada por familiares de personas enterradas al Valle de los Caidos. ¿El motivo de las denuncias? Los retrasos en las licencias municipales.

El futuro de los restos de Primo de Rivera

Hasta el momento, el destino más probables de los restos José Antonio es el madrileño y monumental Cementerio Sacramental de Sant Isidre, donde está enterrada su hermana Pilar y donde los Primo de Rivera tienen varias tumbas. Sin embargo, el destino final de los restos del franquista no será decidido directamente por la familia, sino por el Gobierno, ya que los familiares que quedan de Primo de Rivera no son suficientemente directos y se quedan fuera de la línea de disposición. A pesar de todo, nada impide que la Moncloa y el resto de familiares de Primo de Rivera puedan llegar a un acuerdo sobre dónde enterrar los restos. El futuro lugar de entierro no es una cuestión menor para el Gobierno, ya que quieren evitar crear un nuevo destino de peregrinación para la extrema derecha, como ya pasó con Franco.