Con la crisis diplomática con Argelia sobre la mesa, junto con su detonante: el cambio de posición del Gobierno sobre el Sáhara Occidental, hay otra crisis de lo que se ha cerrado y cierne en torno a las anteriores. Se trata del espionaje al Ejecutivo de Pedro Sánchez. En los últimos días, los miembros del Gobierno han empezado a señalar Rusia como posible responsable. Y si bien ahora es el enemigo público número uno, este no es el Estado que encabeza las quinielas de la mayoría de fuerzas políticas que apuntaba en Marruecos, un sospechoso mucho más inconveniente para el Gobierno. En medio de este enredo, el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) ha confirmado a El Confidencial que descartan la hipótesis que Marruecos haya podido robar información del móvil del presidente español.
La afirmación del CNI descarta de plan que el cambio de postura unilateral del gobierno epsanyol con respecto al Sáhara estuviera motivado por un chantaje de Rabat. Los servicios de Inteligencia también han insistido en que no hubo ningún error de seguridad por parte suya en la revisión de los teléfonos, ya que, según remarcan, para detectar que un dispositivo ha sido contagiado con Pegasus hace falta que se les entregue el terminal. "En otras etapas, los ministros nos facilitaban con regularidad sus teléfonos para limpiarlos", explican las fuentes mientras lamentan que ahora no sea "una cosa habitual", afirman las fuentes de El Confidencial que muestran una actitud crítica con la política de seguridad del actual Gobierno. Estas mismas fuentes también afirman que oficialmente nunca se reconocerá si fue Mohammed VI fue quien espió el Ejecutivo de Sánchez, aunque no descartan esta posibilidad.
Tensión con Argelia
El cambio de postura del gobierno sobre el Sáhara está en el centro de varias polémicas, por una parte, la ya comentada, que Marruecos impulsas el cambio a través del espionaje y el chantaje. Por otra parte, la crisis diplomática con Argelia que sigue copando titulares. Sin ir más lejos, el país ha tildado al ministro de Asuntos Exteriores de España, José Manuel Albares, de "pirómano" para vincular los intereses del país norteafricano con los de Rusia, y ha calificado de "grotesco" su "espectáculo diplomático". En un artículo de opinión, la agencia estatal de noticias, Algérie Press Service, lamenta que Albares haya conseguido "manipular" al Alto Representante para la Política Exterior de la Unión Europea y "compañero de partido", Josep Borrell, para "ensuciar la credibilidad de esta importante institución comunitaria" con la publicación de un comunicado de prensa "infundado" contra Argelia.