Finalmente, el Govern balear ha hecho marcha atrás y no incluirá el castellano como lengua vehicular en las escuelas de las Illes en la nueva ley de Educación. Durante las últimas semanas, sindicatos y entidades baleares habían denunciado el peligro que suponía para el catalán el hecho de que se incorporara una nueva lengua vehicular en las aulas, pero ha sido la ruptura de las negociaciones con el PP lo que ha provocado que no se acabe añadiendo el castellano como lengua vehicular en la enseñanza. Hoy, el conseller de Educació balear, Martí March, ha aceptado a última hora rectificar y que el texto de la nueva ley no incluya esta incorporación y el PP votará en contra del modelo lingüístico. El martes 22 de febrero se debatirá la norma en el Parlamento.
Los partidos del pacto (PSIB-PSOE, MÉS per Mallorca y Unides Podem) han acordado modificar el texto después de que el PP balear anunciara que votará en contra del modelo lingüístico en el pleno, en el que se incluía el castellano como lengua vehicular, algo que finalmente no pasará. Esta modificación supone hacer desaparecer un apartado del artículo 133.1 que apuntaba al tratamiento de las lenguas cooficiales "como lenguas de enseñanza y aprendizaje del sistema educativo de las Islas Baleares, que tendrán el carácter de lenguas vehiculares." Así, puede parecer que el catalán también dejará de ser vehicular, pero quedará blindado por el Decret de Mínims de la ley, en la que se establece que la lengua catalana se tiene que utilizar en, como mínimo, la mitad del horario lectivo. Además, los centros tienen autonomía para incrementar la proporción de asignaturas en catalán según consideren necesario. Mientras tanto, el castellano quedará establecido como una "lengua de enseñanza y aprendizaje" que se podrá utilizar por decisión de cada centro, pero nunca superar la mitad del horario.
Enmienda del PP
Hace unas semanas, el Partido Popular había conseguido incluir el castellano como lengua vehicular en la escuela balear a través de una enmienda. El Gobierno la aceptó siempre que los populares no votaran en contra de los artículos que hacen referencia al modelo lingüístico. Ahora, con la decisión de votar en contra, los partidos del Pacte se han apurado a modificar el texto, que se debatirá el martes en el Parlamento. "El PP ha manifestado que votaría en contra del artículo 133.3, no ha sido posible obtener al menos una abstención y hemos decidido volver a la situación inicial", ha declarado el diputado de PSIB, Carles Bona, en la rueda de prensa posterior a la Junta de Govern. Así, ha confirmado que se elimina la vehicularidad del castellano, defendiendo que desde el Gobierno no se hará "instrumentalización del catalán y velaremos para que la ley sirva para alcanzar todos los objetivos".
Yendo más allá, todos los partidos del Pacto balear, a quienes se les ha sumado el partido Gent per Formentera, han lamentado que el PP haya roto el consenso con respecto al modelo lingüístico, también puntos de la nueva Ley de Educación que ya están recogidos a la Ley de Normalización Lingüística y el Decreto de Mínimos, que se impulsó y consensuó años atrás.
Reacciones
Esta decisión ya ha provocado reacciones entre diferentes entidades que defienden la lengua en las Baleares. Antes de que el Gobierno hiciera marcha atrás, desde la FOLC (Federació d’Organitzacions per la Llengua Catalana) han expresado su rechazo a la aprobación de la Ley de Educación, ya que supone "un obstáculo a la normalización progresiva de la lengua catalana en la enseñanza, al permitir que el castellano sea lengua vehicular", recordando que va en contra de la ley de Normalització Lingüística aprobada con el apoyo de todos los partidos del Parlament que prescribe que el catalán "tiene que ser progresivamente la lengua vehicular en la enseñanza".
Una vez el gobierno ha anunciado que vuelve al plan original y desaparece este apartado del artículo 133, la Obra Cultural Balear ha reconocido que los cambios de última hora "acercan la norma a lo que el OCB habría querido", a pesar de que insisten en la necesidad que "la Conselleria dé un paso adelante en favor del catalán a la escuela e implemente, sin dilación, las 10 medidas urgentes propuestas por nuestra entidad". Entre estas, destacan dinamizadores lingüísticos en todos los centros educativos o cursos de catalán para las familias, por ejemplo.