El Gobierno ha declarado zona catastrófica Catalunya y doce comunidades autónomas más a raíz de los graves incendios forestales que se han vivido este verano.
El primer Consejo de Ministros del curso político ha aprobado como zonas afectadas gravemente por una emergencia de protección civil en las siguientes comunidades: Castilla y León, Andalucía, Aragón, Canarias, Castilla-La Mancha, Catalunya, el País Valencià, Extremadura, las Illes Balears, La Rioja, Madrid, Navarra y el Principado de Asturias.
"Han sido situaciones muy dramáticas y manifestamos la sensibilidad del gobierno", ha dicho la portavoz y ministra de política Territorial, Isabel Rodríguez, en rueda de prensa. Rodríguez también ha anunciado que las trece comunidades autónomas se beneficiarán de una serie de "medidas y ayudas destinadas a paliar los daños personales como materiales" de los afectados.
El ejecutivo español ha considerado que su intervención está "justificada" por "solidaridad interterritorial" ante la "magnitud" de las catástrofes y las medidas que han tenido que adoptar las respectivas comunidades. También ha esgrimido que cuando se tenga una "estimación definitiva de los prejuicios", las regiones recibirán ayudas tanto destinadas a personas físicas como jurídicas, así como las administraciones municipales.
La ministra Rodríguez ha remarcado la visita del presidente español, Pedro Sánchez, el pasado fin de semana en las zonas afectadas de Ávila (Castilla y León), y ha querido reconocer a los profesionales que se dedican a la prevención y extinción de incendios.
La polémica de los hidroaviones
Después del incendio de Llançà, el director general de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamentos de la Generalitat, Joan Delort, aseguró que La Moncloa había impedido la participación de hidroaviones de la Catalunya Norte en la extinción del fuego. El Gobierno, en un comunicado, replicó que "no se consideró oportuno ni necesario solicitar ayuda a la vecina Francia".
En el comunicado, el Gobierno, argumentaba que planteó "reiteradamente" la posibilidad de que la Generalitat contara con la movilización de la Unidad Militar de Emergencias, para así evitar la propagación del incendio y afectaciones a la población.
El asunto de los hidroaviones generó una gran polémica donde los servicios catalanes recriminaban al Gobierno una cierta inacción y falta de respuesta ante el fuego en Llançà. Ahora, el ejecutivo de Pedro Sánchez ha aprobado la zona catastrófica en Catalunya, a causa de los numerosos incendios sufridos durante el verano. Esta medida facilitará muchos trámites y ayudas en las zonas quemadas y para la población afectada.