Pasaban pocos minutos de las cinco de la tarde cuando, según confirman a ElNacional.cat fuentes de su entorno, Núria Marín ha recibido la citación del juzgado número dos de l'Hospitalet para declarar como investigada en la causa sobre la presunta caja B del Consell Esportiu de l'Hospitalet. También deberá declarar como imputado Gerard Figueras, secretario general de l'Esport.
El pasado mes de diciembre, la presidenta de la Diputación de Barcelona y alcaldesa de l'Hospitalet de Llobregat fue detenida por la Unidad de Delincuencia Económica (UDEF) de la Policía Nacional, que la dejó en libertad después de declarar en la comisaría de la Verneda. Se le acusa de malversación y de omisión del deber de preseguir un delito, concretamente el supuesto desvío de las subvenciones que recibía el Consell Esportiu de la ciudad -entidad privada que presidía uno de los concejales socialsitas del ayuntamiento- para fines particulares. Los investigadores calculan que se habría malversado hasta medio millón de euros.
El caso se destapó en junio, con la denuncia precisamente del teniente de alcaldía socialista del municipio. A partir de su testimonio, la UDEF registró la entidad y detuvo el director, también concejal del PSC y otro compañero suyo, el concejal de Deportes de l'Hospitalet. Este último dimitió unos días después.
Fuentes próximas a Marín recuerdan a este diario que ella misma había pedido declarar cuanto antes mejor. Al mismo tiempo, insisten en que la jueza ya tiene elementos suficientes para decidir si abre juicio oral. En cualquier caso, confían en que una vez escuche la declaración de la presidenta de la Diputación, la acabará dejando libre sin cargos.
La moción fracasada de ERC
Tan pronto como saltó la noticia, desde Esquerra Republicana empezaron a moverse para intentar hacer caer Marín de la presidencia de la Diputación. La iniciativa, sin embargo, acabó cayendo. El pleno rechazó la moción presentada por los republicanos, gracias a los votos en contra de PSC y JxCat, las dos formaciones que comparten gobierno a la Diputación. Los únicos partidos que votaron a favor fueron Cs i Tot per Terrassa. Los comunes y el PP se abstuvieron.
Precisamente el pacto de JxCat con el PSC para hacer a Núria Marín presidenta de la Diputación a cambio de entrar en el gobierno supramunicipal es la gran batalla de ERC, que reprocha a los de Puigdemont haber priorizado las sillas antes que el proyecto independentista.