Menos de 24 horas después de que el escándalo del CatalanGate saliera a la luz, en el Parlamento Europeo se constituye la comisión que investiga Pegasus y otro software de espionaje. Justo el día siguiente que The New Yorker y Citizen Lab hicieran público que como mínimo 65 políticos independentistas y miembros de la sociedad civil catalana han sido víctimas del espionaje con este software, la nueva comisión de la Eurocámara celebra su primer encuentro, en el cual se escogerá al presidente y los vicepresidentes de esta. Entre los miembros de la comisión hay eurodiputados que han sido víctimas del software, como la representante de ERC Diana Riba, quien será propuesta por el grupo de los Verdes/ALE para que ocupe una de las vicepresidencias. En la comisión también participa al president en el exilio y eurodiputado de Junts, Carles Puigdemont. Aunque Puigdemont no pare en el listado de Citizen Lab, sí que hay mucha gente de su entorno.
La primera reunión de la comisión europarlamentaria que justo se constituye este martes tendrá lugar por la tarde. Después de escoger a los eurodiputados que ocuparán la presidencia y las vicepresidencias, comparecerán representantes de Forbidden Stories, Citizen Lab y Amnistía Internacional para explicar sus últimas investigaciones sobre ciberespionaje. De esta manera se da el pistoletazo de salida a una investigación que culminará dentro de un año con un informe que mostrará si se han violado los derechos fundamentales de los afectados y la legislación de la Unión Europea.
CatalanGate y la respuesta independentista
El software Pegasus solo se puede adquirir por parte de los Estados y está destinado a combatir el terrorismo y el crimen organizado. En cambio, las investigaciones del The New Yorker y Citizen Lab muestran cómo se han espiado a presidents de la Generalitat, diputados, eurodiputados, activistas, abogados y gente del entorno independentista. Las respuestas a la investigación no se hicieron esperar y la plana mayor del independentismo condenó los hechos. Al fin y al cabo, sin embargo, no se ha quedado solo en una condena inicial y este martes el bloque independentista comparece unido en Bruselas para denunciar el espionaje masivo que se ha denominado CatalanGate.
El software Pegasus se escurre en los teléfonos móviles aprovechando los errores de seguridad de Whatsapp. Una vez dentro, actúa durante un tiempo determinante en que recoge todo tipo de información: mensajes, documentos, fotografías. Cuando ya ha recogido todo tipo de datos, Pegasus borra su rastro, desapareciendo del dispositivo.