Esta tarde empieza el pleno del Parlament. No hay ninguna votación prevista, pero si hubiera, Lluís Puig podría ejercer su delegación de voto, y es que aunque el Tribunal Constitucional declarara el lunes la nulidad de esta delegación, el Parlament todavía no ha recibido ninguna notificación así que mantiene la delegación de voto del exconseller y ahora diputado exiliado en Bélgica a raíz del 1 de octubre. Fuentes parlamentarias han informado de que a estas alturas no hay "ningún cambio" en la delegación de voto de Puig, y han asegurado que no han abordado este tema en la reunión del órgano rector de esta mañana, ya que sólo conocen "la nota colgada" después del pleno del Constitucional.
Fue el lunes cuando el TC decidió anular la delegación de voto, cumpliendo con un recurso que presentó el líder del PSC Salvador Illa contra el acuerdo de la presidencia de la cámara del 25 de marzo del año pasado que admitía la solicitud de Puig delegar su voto. También anula el acuerdo de la Mesa del día siguiente que confirmaba la delegación de voto. En la resolución, el Tribunal Constitucional expone que estima el recurso de Illa y afirma que "se les ha vulnerado el derecho a ejercer las funciones representativas" con los requisitos que señalan las leyes, que se encuentran en conexión con el derecho de los ciudadanos a participar en los asuntos públicos a través de sus representantes. Por eso, acuerda "restablecer a los recurrentes su derecho", y por eso, declara la nulidad del acuerdo de la mayoría independentista de la Mesa.
Tan pronto como se conoció la noticia, el exconseller reaccionó señalando directamente a los socialistas como culpables de la situación: "Gracias a Salvador Illa y el PSC, la represión continúa adelante". No se quedó aquí, y es que el diputado también lamentó que el Tribunal Constitucional haya decidido continuar con su postura, evidenciando las consecuencias que comporta. "Los derechos de las personas que nos votaron vuelven a ser vulnerados", advirtió.
Los socialistas no fueron los únicos a presentar recurso contra la aprobación del voto delegado del exconseller Lluís Puig, sino que también participaron otras formaciones. Concretamente, los otros grupos políticos fueron los de la derecha españolista, Vox, Cs y el PP. Por parte de los naranjas, Carlos Carrizosa hizo el anuncio a través de las redes sociales: "Esta mañana la presidenta del Parlament nos ha amordazado al pleno al pedir una cuestión de orden para la delegación ilegal de voto del huido Lluís Puig. Les anuncio que desde Ciutadans llevaremos al TC esta ilegalidad. No consentiremos que se pisen los derechos de todos", tuiteó el líder de Cs durante la investidura de Aragonès