La decisión de Germà Gordó de retener el acta de diputado y pasar al grupo mixto del Parlamento de Catalunya no ha gustado al Partido Demócrata. Si en un primer momento el portavoz parlamentario de Junts pel Sí ya ha dejado claro que lamentaba la decisión, acto seguido el PDeCAT ha emitido un comunicado por el cual ha insistido en que Gordó, que se dará baja de este partido, tendría que renunciar también al escaño.
"Conocida la decisión del diputado Germà Gordó, la Dirección Ejecutiva Nacional del Partit Demòcrata nos reafirmamos en que lo mejor es que el mencionado diputado renuncie a su escaño en el Parlament de Catalunya", asegura el comunicado, que insiste en que el PDeCAT está "comprometido con la regeneración de la vida pública catalana en todos los sentidos" y que por lo tanto, "defiende y defenderá la presunción de inocencia como pilar fundamental del estado de derecho".
Ahora bien, el mismo comunicado indica que "el momento político excepcional requiere de generosidad personal y colectiva", razón por la cual insiste en que Gordó "renuncie al escaño".
JxSí y ERC se suman a la petición
Junts pel Sí se ha añadido a la petición del PDeCAT y ha pedido a Gordó que entregue su acta de diputado. Desde la formación independentista consideran que, aunque el acta de diputado es individual, el proyecto que representa la coalición hace que los diputados conviertan "representantes". Juntos por el Sí "no es de ninguna persona concreta, sino de todos y cada uno de los candidatos inscritos y de las personas que votaron la candidatura".
Por su parte, ERC ha criticado que el ahora diputado no adscrito haya decidido mantenerse como representante parlamentario a pesar de la larga lista de delitos que presuntamente se le atribuyen. "Representa un fraude al proyecto común [...] transversal que unía diferentes sensibilidades, más allá de los nombres", sentencian los republicanos.