El Partido Popular ha superado todas sus expectativas en Andalucía. Con una victoria de los conservadores que preveían todas las encuestas estas últimas semanas, el objetivo declarado de los populares iba más allá de ser primera fuerza: el candidato y actual presidente de la Junta, Juanma Moreno, había exigido en numerosas ocasiones que la ciudadanía andaluza se movilizara con el fin de permitir que el PP pudiera poner en marcha un ejecutivo en solitario, sin depender de los votos de otras formaciones. Y es que la ultraderecha de Vox había amenazado con reclamar una presencia en el nuevo gobierno si tenían la llave para investir a Moreno, mientras que el PSOE había rechazado completamente regalar los votos a sus rivales con la única intención de evitar la entrada de los ultras en el ejecutivo andaluz.
Finalmente, los populares podrán ir a dormir más que tranquilos esta noche. Y es que en la sede del partido en la capital de Sevilla se prevé que la fiesta dure muchas horas. Las encuestas a pie de urna señalaban que el PP podría conseguir una mayoría absoluta abrumadora. Y a medida que ha ido avanzando el escrutinio definitivo, así se ha confirmado: con un 40% de los votos contados, Juanma Moreno ya ha podido celebrar la cifra de 55 escaños que marca la mayoría absoluta, una tendencia que no ha cambiado con el paso del tiempo. Con el 99% escrutado, se ha situado en 58 diputados.
Estos resultados históricos han permitido consolidar el PP en Andalucía, después de cuatro años de gobierno de la derecha. Una comunidad autónoma que históricamente se había decantado siempre por el PSOE, donde había gobernado durante casi cuarenta años para convertirse en un auténtico feudo hegemónico del socialismo en España. Con la primera mayoría absoluta, los conservadores escenifican el cambio de color en la región. Y es que no solo se han impuesto en Andalucía en su globalidad, sino que también lo han hecho en cada una de las ocho provincias.
Impulso al PP y golpe duro para Pedro Sánchez
A pesar de ser unas elecciones delimitadas al sur de España, está claro que los resultados reverberarán por todo el territorio estatal. Con esta victoria contundente en el bastión del socialismo, el Partido Popular ha conseguido imponerse en los tres últimos comicios, después de hacerlo ya el año pasado en la Comunidad de Madrid y este febrero en Castilla y León. Con esto, sumado al efecto que ha tenido Alberto Núñez Feijóo en las encuestas para hacerse con La Moncloa, la continuidad del presidente español, Pedro Sánchez, está cada vez más en duda más allá de 2023, cuando se celebren las próximas elecciones legislativas.
Así lo ha manifestado en rueda de prensa la secretaria general del PP, Cuca Gamarra, quien ha querido celebrar los resultados, afirmando que "toda España estaba pendiente de Andalucía". Y es así, porque el candidato del PSOE, Juan Espadas, había sido seleccionado especialmente por Sánchez, y la ciudadanía no ha respondido favorablemente. La sensación de un 'cambio de ciclo' en beneficio del Partido Popular es evidente. Ante esta realidad, en La Moncloa están notablemente preocupados, pero por ahora intentan mantener la calma y esperar que la tormenta pase para poder centrarse en la gestión del ejecutivo central y revertir la tendencia negativa.
Fiesta en la sede del PP
A medida que los resultados definitivos han ido anunciando la victoria de Juanma Moreno, decenas y decenas de votantes y simpatizantes del Partido Popular se han ido acercando a la sede de la formación a Sevilla para celebrar la victoria histórica con los suyos. Con banderas andaluzas y españolas, gritos de 'presidente' y música a todo trapo, el ambiente ha sido de una festividad absoluta, con todos los asistentes eufóricos y ansiosos por atender la llegada de Moreno, que se ha dirigido a su público desde un podio y con una inmensa sonrisa de oreja a oreja.
Juanma Moreno: "Hemos hecho historia"
El presidente andaluz se ha lanzado desde el principio a agradecer repetidamente la victoria de hoy a todos los andaluces que lo han votado, y también ha compartido una mención especial para Alberto Núñez Feijóo, quien ha reivindicado por haber estado "colaborando y acertante" durante la campaña. Además, ha tenido un recuerdo, visiblemente emocionado, para todos aquellos andaluces que no han podido experimentar nunca una victoria de los populares durante la hegemonía del socialismo. "Hoy me recuerdo de muchas personas que soñaron de ver una noche como esta, que soñaron con una Andalucía diferente y otra forma de gestionar. Esta noche también va por ellos", ha lanzado.
Y, después de esto, ya ha puesto la directa. "Hoy toca disfrutar de esta noche, pero a partir de mañana mismo nos tenemos que poner a trabajar", ha advertido. Se ha declarado consciente de la responsabilidad que tiene entre manos, y ha prometido a sus ciudadanos "cuatro años de prosperidad, de avanzar y de mejorar". "Construiremos una historia cargada de ilusión, futuro y serenidad", ha dicho. "Hoy hemos hecho historia en Andalucía".
Pero también ha compartido algunas referencias hacia la intención del PP de convertir esta victoria en el sur de España en el revulsivo que se extienda por todo el país y permita derrotar el presidente Pedro Sánchez. Sin una mención explícita, ha reivindicado que han dado "un ejemplo" a toda la nación, y que harán "grande Andalucía para hacer grande toda España". Y no ha podido evitar subrayar su vínculo emocional con su comunidad autónoma y su país con un clamor: "Andalucía es una tierra profundamente orgullosa del que somos y de ser españoles".