El dictamen votado hoy por la Comisión del Estatuto de los Diputados ha contado con el voto favorable de Junts, ERC, la CUP y en Común Podemos. Por contra, el PSC ha votado en la misma dirección que lo ha hecho la derecha españolista de Vox, Ciutadans y el Partido Popular. De esta manera, los socialistas han rechazado defender el escaño del diputado de la CUP y secretario tercero de la Mesa del Parlament, Pau Juvillà, en los plazos que lo argumenta el dictamen, el cual mantiene que el anticapitalista tiene que preservar su escaño siempre que no comprometa a los funcionarios de la Cámara catalana. Este informe, que tendrá que ser ratificado en pleno parlamentario, llega a dos días que se cumpla el plazo que fijó la JEC para que la presidenta del Parlament, Laura Borràs, ejecute la retirada del acta del diputado cupaire.
El diputado del PSC David Pérez ha informado de que votarán en contra de la resolución, que considera "débil desde el punto de vista jurídico" porque "no hay ninguna firma de ningún letrado o jurista". Así, ha opinado que ningún informe parlamentario puede ir en contra de lo que sentencia la Junta Electoral Central, por lo cual ha pedido cumplir la sentencia y retirar el acta de Pau Juvillà, evidenciando el cambio de postura de los socialistas sobre esta cuestión. También ha aprovechado la oportunidad para criticar la propuesta de suspender la actividad institucional, que considera una muestra de "teatralización e improvisación".
Más duro ha sido el diputado de Vox Antonio Gallego, que ha reiterado que Juvillà ha sido condenado por inhabilitación, por lo cual ya no puede ser diputado, y ha exigido a los partidos independentistas que cambien de camino: "Sigan haciendo este papelote, están a punto de hacer un nuevo delito de desobediencia". Además, ha asegurado que la Comisión del Estatuto de los Diputados "no es vinculante y nada cambiará el destino" del anticapitalista, mientras que ha tildado de "churro" el dictamen. Con respecto al parón de la cámara catalana, la ha considerado una "cacicada antidemocrática vergonzosa". Como en otras ocasiones, ha amenazado con presentar una denuncia ante los tribunales: "Esta denuncia también la ganaremos, y más diputados separatistas acabarán como Juvillà".
Juvillà no es diputado "según la Loreg"
El diputado de Ciudadanos Nacho Martín Blanco ha remarcado que, según la Ley Orgánica del Régimen Electoral General (Loreg), no puede ser diputado una persona condenada por desobediencia, aunque esta no sea firme. "Juegan a despistar", ha advertido. Con respecto al dictamen aprobado, lo ha tachado de "papel mojado" y una pérdida de tiempo que llevará igualmente a la pérdida del escaño por parte de Juvillà. "Están intentando engañarnos con un buñuelo semijurídico", ha criticado.
También la diputada del PP Lorena Roldán ha mantenido esta dirección, comparando la situación del secretario tercero de la Mesa con la cual vivió el expresidente de la Generalitat Quim Torra: "Él ya ha acabado en su casa, como también lo hará Juvillà". De la misma manera que Martín Blanco, ha remarcado que la Loreg no ampara a un diputado si este ha sido condenado por desobediencia. Así, ha criticado que, en cambio de sacarle el acta, la presidenta del Parlament Laura Borràs "ha pasado la pelota" a la Comisión del Estatuto de los Diputados.
Los comunes, en defensa de Juvillà
El único partido de la oposición que no ha compartido esta línea ha sido en Común Podemos. Su diputado David Cid ha asegurado que la JEC "se está extralimitando de sus funciones", y ha reiterado que Juvillà no tiene que perder su escaño hasta que la sentencia contra él sea firme. Precisamente por eso, los comunes han votado a favor del dictamen, aunque su postura no ha estado sin críticas. A los independentistas ha reprochado la decisión de paralizar la actividad parlamentaria, una decisión que cree que "no ayuda a entender la cual está pasando". Más allá, ha pasado la pelota a Borràs, avisando de que es ella al cual tiene que tomar la decisión definitiva" sobre el acta del diputado de la CUP.