Pocas horas después de que se diera a conocer la intención de Felipe VI de encontrarse con su padre, Juan Carlos I, cuando este vuelva al estado español, el día en que el emérito volverá a poner un pie en España parece cerrado. Según ha avanzado Onda Cero, el Borbón volverá después de dos años residiendo en los Emiratos Árabes Unidos el próximo sábado 21 de mayo. El destino del emérito sería Galicia, donde pasaría el fin de semana en Sanxenxo (Pontevedra). Anteriormente, La Razón señaló que la vuelta del emérito sería en Galicia, especialmente en el marco del Campeonato del Mundo de Vela. Finalmente, parece que el aspecto náutico quedaría en un segundo plano, ya que este campeonato no tendrá lugar hasta dentro de un mes, pero sí que se confirmarían los rumores que hace meses apuntaban a que la vuelta del monarca sería a través de Galicia.
El emérito pasaría el fin de semana del 21 y 22 de mayo en el estado español. En este tiempo tendría que pasar por Madrid para ver a su hijo, como planificaron por teléfono. Los dos Borbones se encontrarán en la capital española. Una de las grandes incógnitas que hace meses que rodea una posible vuelta del emérito es: ¿pasará por el palacio de La Zarzuela? Según las informaciones de Onda Cero, Felipe y Juan Carlos se reunirán en el palacio.
Visita puntual
Desde que el emérito se empezó a librar de las acusaciones de corruptelas que colgaban de su espalda, empezó a planear su vuelta al estado español. Estos planes han generado tensión entre La Zarzuela, La Moncloa y el mismo clan de los Borbones. Finalmente, el acuerdo para volver a España acabó cerrado con una condición: el emérito seguiría residiendo en los Emiratos y visitaría España "con frecuencia".
Las aspiraciones iniciales de Juan Carlos implicaban una larga lista de peticiones y condiciones para su retorno, como establecer su residencia en la Zarzuela y recuperar algunos de sus viejos privilegios. Muchas de las condiciones que exigía el emérito se han acabado descartando ante la posibilidad de que su retorno todavía dañara más la imagen de la monarquía española. También por imagen, este fin de semana, cuando Felipe ha sido a los Emiratos para mostrar sus condolencias por la muerte el anterior jefe del Estado, el jeque Jalifa bin Zayed al Nahyan, ha evitado encontrarse con su padre.
En todo este proceso de negociación para la vuelta del emérito, la relación entre padre e hijo se ha ido tensando y sus desacuerdos han llegado a ojos del público. En este contexto, de llamadas telefónicas discretas y ninguna aparición conjunta en años, el emérito volverá a poner un pie en España entre una gran expectación.