El mayor sindicato policial español, Jupol, se fractura por los gastos irregulares del secretario general, José María García. Según El País, miembros del comité ejecutivo lo acusan de realizar una gestión personalista, llevar al sindicato a posiciones extremistas y cargar en las cuentas gastos personales como entradas de cine, ropa, perfumes y fármacos.
Asamblea crítica
Cinco miembros del consejo ejecutivo del sindicato Justicia Policial, Jupol, han convocado una asamblea extraordinaria para el próximo 2 de junio con la finalidad de reprobar y cesar al secretario general de este, José María García. Este hecho fractura la organización mayor dentro del cuerpo Nacional de Policía, con unos 25.000 afiliados, un tercio del total del cuerpo policial. José María, conocido como Chema, niega los gastos.
Una quincena de comités regionales y provinciales han mostrado su apoyo. Así dividiendo al sindicato entre los favorables a José María y los contrarios a su gestión.
Un fracaso de huelga
Según informa El País, el inicio de la desentendida empezó en la manifestación que el sindicato convocó el 3 de marzo del año pasado, donde los policías se concentraron para presionar en los miembros del Congreso para que aprobaran una Iniciativa Legislativa Popular (ILP) para blindar la equiparación salarial con la de las policías autonómicas, Ertzaintza y Mossos. Entre los concentrados se repartió un folletín que pedía a los agentes a hacer una huelga encubierta, ya que los policías tienen prohibido este derecho, y les recomendaba pedir la baja por enfermedad. El paro no se siguió y fue un fracaso.
"Aquel día dimos una imagen lamentable tanto de la policía como del sindicalismo, y algunos comprendimos que Jupol se había escorado hacia posturas muy alejadas del verdadero objetivo con el cual nació", asegura un exdirigente de Jupol.
Un sindicato intransigente
Cuando se celebró la manifestación delante del Congreso de los diputados, Vox ya se había abanderado como el principal altavoz de las proclamas de Jupol, desplazando Ciudadanos, que había dado su apoyo al sindicato desde sus inicios. "En poco tiempo pasamos de ser un sindicato con posiciones firmes, pero abierto al diálogo, en otro con una postura intransigente que ha hecho denuncias en los juzgados contra la cúpula de Interior su única estrategia", critica el exdirigente.