El Tribunal Constitucional (TC) ha decidido por unanimidad desestimar la petición de suspensión cautelar de C's y PP, que reclamaban que se impidiera la celebración del pleno del Parlament del próximo lunes sobre la propuesta de inicio de la creación de un estado catalán. “El Parlamento es la sede natural del debate político”, dice el tribunal, y este no se puede impedir anticipadamente porque el resultado previsto no se acomode a las leyes vigentes. La celebración del debate pasa por delante de su resultado previsible.
El TC recuerda, sin embargo, que es la Cámara catalana quien tiene que “velar” para que las decisiones que se tomen cumplan con la Constitución y el ordenamiento jurídico.
Se lo han tomado a pecho. Los magistrados han dejado su trabajo ordinario para decidir si admitían a trámite los recursos presentados por el PP, el PSC y C's. Cabe decir que, en el suyo, el PSC no pedía la suspensión del plenario. El encuentro, sin embargo, ha empezado una hora más tarde de lo que tenían previsto, a las once de mañana. Dos horas después, los once magistrados han parado para comer, han vuelto sobre las cuatro y media y han emitido la resolución hacia las siete de la tarde.
En resumen, el TC considera que no tiene que tomar ahora una decisión extraordinaria con el fin de paralizar la resolución –es decir, antes de que se apruebe– si lo puede hacer por la vía ordinaria, una vez aprobada este lunes en el pleno, y ha comunicado que actuará “cuando proceda, con prudencia y determinación.”
Esta última vía tiene menos riesgos. El presidente del TC ha conseguido unanimidad en todas las resoluciones sobre el conflicto catalán. Una actuación extraordinaria ponía en peligro esta unidad de decisión, porque algunos de los magistrados no habrían votado una decisión excepcional como suspender la actividad del Parlamento por un hecho que todavía no se ha producido y cuyo contenido se desconoce.
El escándalo habría sido enorme. Un ejemplo: la portavoz de Junts pel Sí, Marta Rovira, ha dicho esta mañana que “si el TC suspende el plenario, suspende la democracia”. Además, la autoridad del TC, cuestionada también en la Catalunya moderada, habría quedado muy tocada.
El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, ha apoyado la decisión del Constitucional hoy en Navarra y ha hecho un llamamiento a mantener la “unidad nacional”. Rajoy ha argumentado que “el estado de las autonomías se está enfrentando a una situación complicadísima”, con un frente independentista que los obliga a sumar fuerzas. También ha pedido a las fuerzas soberanistas que sean “capaces de rectificar”.