Es un no parar: la obsesión de algunos partidos contra el voto delegado del exconseller Lluís Puig vuelve a amenazar la Mesa del Parlament. Este martes, en la Mesa ordinaria, los grupos han recibido la notificación de dos nuevos recursos que el TC ha admitido a trámite contra la delegación de voto del exconseller en el exilio, ahora de Vox y Ciutadans. Según han explicado fuentes parlamentarias, hoy la Mesa ha tomado conocimiento, y tiene un plazo de 10 días para personarse.

Este recurso contra el voto de Puig en el pleno de investidura de Pere Aragonès no es una novedad, y es que el Partido Socialista ya presentó un recurso similar el mes de abril delante del TC, en contra de la admisión de voto delegado que se aprobó con el voto favorable de la mayoría independentista. Este recurso fue admitido a trámite el 4 de octubre del año pasado, y cuando llegó a la Mesa, la presidenta del Parlament, Laura Borràs, aseguró que su compromiso es la defensa de los derechos de los diputados. Al igual que pasa ahora, el TC abrió un plazo de 10 días para que la Mesa se personara y así lo hizo: presentó alegaciones, que todavía no han recibido respuesta.

 

Por su parte, Ciutadans presentó su recurso en junio de 2021 y fue admitido a trámite este mes de febrero. En el escrito de admisión del recurso presentado por Cs contra el acuerdo de la Mesa del Parlament de delegar el voto de Puig porque estaba en el exilio, el Constitucional considera que "no hay doctrina" jurídica sobre la cuestión y que, por lo tanto, su caso podría servir para sentar un precedente, y que "podría tener consecuencias políticas generales".

Los recursos son en contra de los acuerdos de la Mesa del 25 y 26 de marzo de 2021 sobre la delegación de voto de Puig por la investidura de Aragonès, y contó con el apoyo de los miembros de Junts, ERC y la CUP y el voto en contra de los socialistas. De hecho, en aquel momento los grupos PSC-Units, Vox, Cs y el PP pidieron a la Mesa reconsiderar esta decisión al creer que Puig no reunía ninguna de las causas establecidas por el reglamento del Parlament para delegar el voto, aunque finalmente las reconsideraciones no prosperaron y se contabilizó el voto de Puig. Entonces el PSC presentó recurso, también Ciudadanos y también Vox.

El voto de Puig

Antes de la investidura del presidente Aragonès, los miembros de la Mesa se reunieron y valoraron las reconsideraciones que en un primer momento presentaron el PSC, el PP y Vox y, posteriormente, la de Cs. Los miembros independentistas de la Mesa se pronunciaron a favor del voto de Puig, mientras que Jaume Alonso-Cuevillas, por ser abogado del conseller en el exilio, se abstuvo. Sin embargo, el resultado fue suficiente para avalar la propuesta.

El diputado de Junts, instantes después de la decisión, mostró su agradecimiento a las formaciones independentistas por "defender los derechos de todas las personas que ejercieron su derecho al voto". Por su parte, los socialistas apuntaron en su escrito en el tribunal que las causas para pedir la delegación del voto son "baja por maternidad o paternidad; y los supuestos de hospitalización, enfermedad grave o incapacidad prolongada debidamente acreditada, que tienen que ser interpretadas de manera restrictiva y no admiten ampliar los supuestos, expresamente previstos efectuando una interpretación analógica a otros supuestos".