Hay varias melodías en las filas de Esquerra Republicana. El presidenciable Pere Aragonès, después de empatar en primera posición con el PSC, apuesta por un amplio entendimiento, que vaya de ERC y Junts per Catalunya, hasta la CUP y, también, los comunes. En cambio, hoy Gabriel Rufián ha apelado a otra mayoría, un "frente amplio de izquierdas". Se ha dirigido a la CUP y a los comunes. En cambio, no ha mencionado a Junts dentro de este bloque.
Ha sido durante el debate de la moción de ERC en el Congreso de los Diputados, que pide la negociación de un referéndum al Estado. En este contexto, el portavoz republicano en Madrid ha defendido que "las izquierdas independentistas y autodeterministas hemos ganado y sumamos como nunca". Eso, ha continuado, "nos obliga, nos mandata, nos condena a entendernos". Como fuerza ganadora de estas izquierdas, ha apuntado Rufián, ERC "asume el liderazgo de esta mayoría".
En este sentido, el dirigente republicano se ha dirigido explícitamente a "las señorías de la CUP y de los comunes", pero no a las de JxCat, para "intentar y hacer que las izquierdas predominen en un frente amplio en el Govern de la Generalitat". Sólo ha tenido un mensaje para la candidatura de Laura Borràs, aunque también sin citarla: "Dejen de marcarnos el ritmo aquellos que se pensaban que habían ganado tanto que se pensaban que el país era suyo". También ha avisado de que "no somos los criados de nadie".
Junts per Catalunya ha evitado los reproches, más allá de constatar el fracaso de la moción de ERC por el referéndum. La diputada Míriam Nogueras, que se prepara para ser la nueva portavoz en Madrid, ha enviado un mensaje de entendimiento: "Pongámonos de acuerdo, juntos lo podemos hacer". A los comunes les ha reclamado que "dejen de mercadear y sean útiles". La cupera Mireia Vehí ha constatado cómo "el independentismo ha vuelto a ganar las elecciones", por decimotercera vez seguida, y que hay que ponerse a trabajar aenCatalunya para hacer posible el avance nacional y el avance social. También ha evidenciado cómo la mesa de diálogo "no está funcionando" y por eso presentan mociones en el Congreso.
Moción fracasada
El texto, que ha defendido Gabriel Rufián delante del Congreso, reclamaba al Gobierno la negociación de un referéndum de autodeterminación para Catalunya. Pero, en la votación de este jueves, chocará con el muro del Gobierno. El no del PSOE ya era previsible. No tanto la abstención de Unidas Podemos, que defiende la consulta pero critica el cómo y el cuándo escogido por los republicanos. El cómo no tendría que ser una moción en el Congreso y el cuándo no tendría que ser 48 horas después de las elecciones catalanas.