La fecha que más se ha repetido en las quinielas es la del 17 de diciembre. Este próximo viernes estaba marcado en el calendario para que el rey emérito Juan Carlos I volviera a España. Sin confirmaciones oficiales y una campaña mediática sin precedentes para alabar su figura y recibirlo con todos los honores, la incógnita continúa. Ahora, es el entorno del emérito que culpa al presidente español Pedro Sánchez de poner trabas a su retorno: "No quiere que vuelva", explican los amigos de Juan Carlos I al diario Voz Pópuli.
La argumentación la justifican con la secuencia de hechos de las últimas tres semanas. De entrada, consideran que justo después de hacer correr públicamente su intención de volver a la Zarzuela, la Fiscalía del Tribunal Supremo decidió prorrogar la investigación contra el exmonarca. Fue justamente el pasado 2 de diciembre, cuando faltaban quince días para que se cerrara el plazo que tenía Suiza para hacer llegar las informaciones fiscales recogidas del emérito entre el 2015 y el 2016, cuando la Fiscalía ordenó una prórroga de medio año extra para seguir investigando.
"Felipe VI no se impone"
Y tirando de hemeroteca, los amigos del rey recuerdan que fue el mismo Sánchez quien pronunció la famosa pregunta retórica sobre "¿de quién depende la fiscalía?". Así pues, el Teniente Fiscal del Supremo, Juan Ignacio Campos, fue designado en enero del 2021 y van de la mano de la Fiscal General del Estado, Dolores Delgado.
A pesar de los esfuerzos de la parrilla televisiva por reiterar su retorno, tampoco ha gustado la reciente entrevista al exdirector del CNI, Alberto Saiz, al programa Salvados de La Sexta donde confirmaba las corruptelas de Juan Carlos I o los pagos con dinero público a la vedette Bárbara Rey para hacerla callar cuando era su amante.
La infanta Elena viaja a los Emiratos
En paralelo, el entorno del borbón lamenta que su hijo calle: "Felipe Vi podría dar el visto bueno de forma inmediata pero no quiere un enfrentamiento con Pedro Sánchez ni un choque institucional, la decisión será acordada". Lo excusan con qué "quiere evitar problemas" y "no se impone". Una actitud, la de Felipe VI, bien diferente de la que ha mantenido a su hermana, la infanta Elena.
Por todo ello, ha decidido viajar hasta Abu Dhabi y consolar a su padre. Su visita parece una prueba definitiva que su retorno, como mínimo, de momento se aplaza. La infanta Elena, según informa Voz Pópuli, quiere "convencer Juan Carlos de que instalarse en la Zarzuela no es una buena idea". Pero el emérito está preocupado con una sola idea: "Quiero morir en Zarzuela". De momento, se tendrá que consolar con la hija mayor.