La presidenta del Parlament, Laura Borràs, ha sufrido un robo. Así lo ha informado este domingo en su cuenta de Twitter. A través de un tuit, ha detallado que las personas que han entrado en su casa "solo se han llevado documentos personales". La también presidenta de Junts per Catalunya informa de que ya ha presentado una denuncia sobre este robo ante los Mossos d'Esquadra, y ha aprovechado para agradecer "la profesionalidad del servicio de escoltas, los agentes de la comisaría y de la policía científica" que están actuando ante este "ataque a mi privacidad". Como no podía ser de otra manera, este robo ya ha provocado reacciones dentro del entorno de la presidenta de la cámara catalana, así como en el movimiento independentista en general. Uno de los que se ha pronunciado ha sido el secretario general de JxCat, Jordi Turull, su principal compañero de filas. El exconseller y ex-preso político ha trasladado "muchos ánimos" a Borràs, y también ha querido trasladarle "todo el calor y apoyo" para ella y su familia.
Este robo recuerda al ataque que sufrió el abogado Gonzalo Boye en Madrid en enero del año 2020. Unos desconocidos entraron en su despacho de la capital española y el letrado de Borràs, Carles Puigdemont y Quim Torra denunció los hechos ante la policía española. Agentes de la policía científica del CNP se dirigieron hasta este despacho de la calle Pilar de Zaragoza para investigar el caso. "Han entrado en nuestro despacho durante la noche", explicó el letrado, que aseguró que se lo habían encontrado "todo revuelto". De sus palabras se deducía que todavía no le habían robado nada y que la empresa de seguridad informó de que no había "indicios de intrusión". Boye es muy claro ante esta acción: "Si se piensan que nos intimidarán, lo tienen claro". El letrado mostró los destrozos que hicieron los asaltantes en material informático, concretamente del servidor. Los ladrones, dijo, no se llevaron los ordenadores, "pero parece que les interesaba nuestro servidor", explica. También revolvieron a conciencia cajones y armarios donde el letrado tenía documentación.
La noticia llega menos de un mes después de que transcendiera un mensaje de voz que la presidenta del Parlament envió a Roger Espar, un funcionario del Institut de les Lletres Catalanes (ILC) en el cual Borràs se ofrecía a pagar una factura a Isaías Herrero, amigo suyo, sobre el encargo de una web a la ILC; cuando ella ya no era directora de la institución y ocupaba el cargo de consellera de Cultura. El mensaje decía lo siguiente: "Escucha, soy Laura, que me escribe Isaías, me dice que no se le pagó la factura de diciembre. Bueno, hay un tema de servidores que me dice que ellos lo podrán pagar en este mes; yo tengo miedo de que no esté el portal en este blog. Yo le he dicho que si conviene ya le pagaré yo, pero que necesito saber que no (... ) sin darnos información. Agiliza por favor, con el CETTI, que pasen el presupuesto para hacer la adaptación del portal (...) Después había el tema pendiente de la contratación de este año, no sé si lo has podido hacer o no"