La Assemblea Nacional Catalana ha celebrado este fin de semana una maratoniana jornada de debate con el fin de fortalecer el movimiento independentista e impulsarlo de cara al futuro. Horas de exposición y enfrentamiento de opiniones entre un total de 57 entidades del movimiento civil (con Òmnium Cultural, el Consell de la República y la Associació de Municipis per la Independència presentes) y centenares de ciudadanos han permitido extraer un puñado de ideas bastante que posteriormente se articularán en forma de pacto nacional de todos los actores independentistas. En su rueda de prensa del lunes, ERC ha aplaudido con cautela, remarcando que la movilización del movimiento es "clave", por lo que es imprescindible aglutinar y sumar. "Cualquier iniciativa para fortalecer la movilización en clave positiva se nos encontrarán extendiendo la mano con la voluntad de ayudar al máximo", ha dicho la portavoz, Marta Vilalta.
Pero su intervención ha mutado entonces para coger un tono de alerta y de crítica hacia la entidad. "Con el historial más reciente de la ANC, hemos visto que siguen contribuyendo a alimentar la división del movimiento independentista entre 'buenos' y 'malos'", ha denunciado. Marta Vilalta ha acusado a la organización presidida por Dolors Feliu de haberse alejado de las "dinámicas de suma" que tradicionalmente habían caracterizado la ANC. "Últimamente, no hemos visto la transversalidad y la pedagogía que era una de sus funciones claves".
Una ley a medida de Laura Borràs
La portavoz republicana también se ha pronunciado sobre una propuesta presentada por el PSC, que busca modificar la ley sobre asignaciones temporales y pensiones a los presidentes del Parlamento. Los socialistas quieren eliminar las pensiones vitalicias a la presidencia de la cámara, reducir los importes y limitarlos a seis meses, un debate que ha aparecido en las últimas semanas a raíz del juicio a Laura Borràs. La ley actual de 1988, modificada en el 2003, prevé que cuando un presidente abandona el cargo cobre el 80% del sueldo durante la mitad del tiempo que lo ha ejercido o un mínimo de 4 años. Los socialistas proponen que sea del 20% y durante 6 meses.
"Lo estudiaremos y valoraremos", ha dicho Marta Vilalta, añadiendo que los socialistas han hecho llegar la propuesta a su grupo parlamentario. ERC se ha mostrado dispuesta a hacer las "reformas necesarias" con respecto a las asignaciones temporales y pensiones a los presidentes del Parlamento. Pero han enviado un mensaje de alerta para que el PSC no haga "demagogia" con esta cuestión y no caiga en la trampa de la "antipolítica": a los republicanos les preocupa que esta iniciativa tan solo desprestigie la cámara catalana, por lo que ha exigido ampliar el foco. "Creemos que la visión se tiene que hacer conjunta, global, con una mirada amplia", ha pedido, indicando que a otras instituciones del Estado también se dan casos similares que hay que resolver.