Esquerra Republicana afronta su primer debate de política general en el Parlament formando parte de la oposición por primera vez en ocho años y en medio de una crisis interna que se agrava. Lo hace también después de haber investido a Salvador Illa como president de la Generalitat a cambio de un pacto que recoge, entre otras cosas, una financiación singular para Catalunya. Es en este elemento donde Josep Maria Jové, presidente del grupo parlamentario de ERC, ha querido poner el foco en su discurso en la cámara catalana, con una clara advertencia al presidente Illa: "El cambio de modelo de financiación es fundamental para nosotros. Sin la voluntad no habría habido investidura. Sin la concreción de la financiación singular, no puede haber legislatura", ha advertido Jové desde el atril, insistiendo en que si el PSC o el PSOE rebajan las expectativas en torno a este pacto, se quedará sin mayorías en el Parlament y mirando hacia la negociación de los presupuestos del 2025: "Sin concreciones en financiación no habrá conversaciones de presupuestos y todo el mundo sabe que las legislaturas avanzan con presupuestos, sin ellos tienen poco recorrido, tanto aquí como en Madrid," ha insistido Jové.
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El acuerdo para una financiación singular ha generado mucho alboroto dentro y fuera de Catalunya, también por su nombre, con el PSOE negando de pleno que se trate de un concierto económico como el vasco o el navarro. Jové también ha querido responder: "Nuestro objetivo es que la Generalitat gestione todos los impuestos y que se contribuya a la solidaridad de manera transparente y evaluable. Que cada uno le llame al sistema como quiera, pero en otras latitudes este modelo ya existe y le llaman concierto", ha resuelto. El republicano también ha mirado hacia Junts per Catalunya, a quien ha reclamado que se sume a estas demandas y que también se añada a la lucha por un nuevo modelo de financiación: "Renunciar a tener más recursos no tiene ninguna explicación. Solo se entiende si es por los celos de no poder colgarse la medalla y por partidismo chapucero". Por eso, ha pedido al partido del president Carles Puigdemont "aprovechar juntos la fuerza que tenemos, porque el país se lo merece".
Illa se compromete con la financiación
Ante esta advertencia de Jové y ERC sobre una legislatura corta en Catalunya (y en el Congreso) si no se hacen avances en financiación, Illa ha mostrado su compromiso con el acuerdo firmado en agosto y ha prometido las concreciones reclamadas por Esquerra, entre advertencias de que "buenas palabras" no es suficiente para retener su apoyo. "Nos dejaremos la piel", ha remarcado desde el atril del Parlament el presidente de la Generalitat. También ha advertido, sin embargo, que no será un camino fácil, reconociendo que su partido "se ha movido" en este sentido para conseguir el apoyo de ERC a la investidura.
Más avances en soberanía
ERC no solo quiere avanzar en soberanía fiscal a través del nuevo modelo de financiación, sino también en soberanía nacional y social con unos acuerdos que, según ha remarcado Jové, "hace unos años les habría incomodado y que requerirán una ambición que no hemos visto en ningún sitio": "Ambición quiere decir defender las instituciones, quiere decir que somos una nación sin acatamiento al rey, sin banderas impropias en las instituciones. Esta es la diferencia entre un gobierno republicano y uno monárquico", ha añadido Jové, haciendo referencia al hecho de que Illa ha recuperado la bandera española a sus despachos y también por la reunión con Felipe VI en la Zarzuela.
Como ya hizo ayer Marta Vilalta después del discurso, comparando Illa con un delegado del Gobierno en Catalunya, Jové se ha mostrado preocupado por|para la falta de ambición y nuevas propuestas del presidente de la Generalitat: "Ambición es lo que le pedimos, asumir altas cuotas de soberanía. ¿Y quiere decir? Financiación singular, sí; inclinarse ante el rey, no. Arrinconar la bandera no, ampliar el aeropuerto al servicio de AENA tampoco. Recuperar la ley de alquileres de temporada sí, supeditarse ante Madrid, no", ha resumido.
Y el objetivo final de Esquerra es el referéndum para decidir el futuro de Catalunya, tal como remarca Jové en el debate de investidura, advirtiendo al presidente Illa que, si bien eso la incómoda, los republicanos son "independentistas" y sus votos para investirlo tienen "este objetivo": El conflicto político continuará latente hasta que los catalanes podamos decidir el futuro político votando. Hay que votar, hacen falta urnas, votos y valentía política. Esta es la única vía de resolución y la pretendida normalidad será mentira hasta que no pase".
Mano tendida a comunes y CUP
Jové ha querido dejar claro durante su parlamento que sus socios naturales no son el PSC ni Junts, sino los comunes y la CUP, las "izquierdas soberanistas e independentistas", que, tal como ha remarcado, tienen solo 30 diputados de 165 en la cámara catalana, después de que las tres formaciones sufrieran grandes batacazos en las urnas el 12 de mayo.