ERC bajaría dos escaños si ahora se celebraran elecciones en el Congreso de los Diputados, según una encuesta de Electomanía. Un resultado que llega después de que el president de la Generalitat, Pere Aragonès, haya dado el brazo a torcer ante la presión del secretario general del PSC, Salvador Illa, y haya aceptado el Hard Rock, el Cuarto Cinturón y la ampliación del aeropuerto a cambio de los votos favorables de los socialistas al proyecto de presupuestos. En el panel que Electomanía publica este domingo, ERC obtendría 10 escaños en el Congreso de los Diputados, tres menos de los 13 que tiene en la actualidad, y dos menos respecto del panel del 22 de enero del portal, cuando aún no estaba claro el acuerdo de presupuestos entre ERC y el PSC.
ERC pierde el apoyo de 63 municipios
En total, ERC perdería la victoria de 63 municipios. El PSC le haría el sorpasso en 7 municipios, entre los cuales es especialmente destacable Lleida, que en las elecciones generales de noviembre del 2019 votó mayoritariamente a la formación republicana. Los otros municipios que han cambiado el sentido de voto en favor de los socialistas son Querol, Sallent, Sant Esteve Sesrovires, Molins de Rei, Sant Just Desvern y Tordera. Así pues, el acuerdo de presupuestos habría reforzado la imagen del PSC y habría perjudicado la de ERC en estas localidades, que el 10N se pintaron de amarillo.
Sin embargo, es mucho más acusado el trasbalse hacia la formación que lideran Jordi Turull y Laura Borràs, dado que 56 municipios que hasta la semana pasada daban el voto a ERC, ahora apostarían por Junts per Catalunya. En la demarcación de Girona, este cambio se produce en los municipios de Llívia, Isòvol, Maçanet de Cabrenys, Sales de Llierca, Tortellà, Mollet de Peralada, Rabós, Vilanant, Castelló d'Empúries, Garrigoles, Torroella de Montgrí, Sarrià de Ter, La Bisbal del Empordà y Hostalric. En Barcelona, cambian del amarillo al turquesa los municipios de Gualba, Campins, Sant Celoni, Santa Maria de Palautordera, Òrrius, Cabrils, Sant Martí de Centelles, l'Ametlla del Vallès, Balsareny, Fonollosa, Manresa, Calaf, Rubió, Igualada, Orpí, La Pobla de Claramunt y Torrelavit. En Tarragona, el sentido de voto cambia en las localidades de Freginals, Vot, Vilalba dels Arcs, Garcia, La Torre de l'Espanyol, Colldejou, Les Borges del Camp, Almoster, Masllorenç, Valls, La Riba, Solivella, Sarral y Les Piles. Finalmente, en la demarcación de Lleida, Junts ganaría en Soses, Juneda, Vinaixa, Tàrrega, Menàrguens, Os de Balaguer, Àger, Talarn, Massoteres, La Pobla de Segur y Les Valls de Valira.
A pesar del aumento de los apoyos, no sería suficiente para aumentar los escaños de Junts per Catalunya en la Cámara Baja, que se mantienen invariables en 8.
El PP obtendría la mayoría absoluta si pacta con Vox
Mientras que la estrategia de los socialistas da frutos a Catalunya, la tendencia es muy diferente en el conjunto del estado español. En esta encuesta, el PSOE no consigue recuperar el voto en ningún municipio fuera de Catalunya y obtiene 96 escaños, tres menos de los que había obtenido en el panel de Electomanía del 29 de enero, en el cual obtenía 99. El pronóstico es malo si se compara con los resultados del 10N, que otorgaron 120 escaños a los socialistas.
Las mermas del PSOE son ganancias del PP, que consigue el sorpasso en 56 pueblos y ciudades. El aumento de votos se traduce en 135 escaños para los populares, cuatro más respecto del panel del 29 de enero, que les otorgaba 131, y una cifra muy superior a los 89 actuales. No obstante, para poder alcanzar la mayoría absoluta necesitarían pactar con la extrema derecha, a quién la encuesta otorga 47 escaños. Son dos más de los 45 que el panel proyectaba la semana anterior para Vox, pero que representan un resultado negativo si se comparan con los 52 obtenidos en las últimas elecciones generales.