"Esquerra Republicana es el único partido independentista que presenta una propuesta para la resolución del conflicto". Este es el mensaje que repiten desde los últimos meses los de Oriol Junqueras: ser el único partido que tiene una estrategia más allá de "declaraciones mágicas", en referencia y crítica a sus socios de Govern y de camino, Junts per Catalunya y la CUP. Los republicanos apuestan por el diálogo, un diálogo con el estado español sin embargo, que todavía no ha dado frutos y que está encalladisimo y sin fecha. Sea como sea los republicanos tienen claro que quieren afianzar esta apuesta, y lo escenificarán este fin de semana en la Conferencia Nacional del partido que se celebra el sábado y domingo en la Farga de l'Hospitalet de Llobregat, donde se aprobará la ponencia política, la hoja de ruta de los republicanos para los siguientes años.

"La mejor manera de resolver el conflicto político es a través de un proceso de negociación política que nos permita confrontar las ideas democráticamente. La mejor confrontación democrática es la mesa de negociación", clama uno de los puntos clave de las cerca de 40 páginas que tiene la ponencia, una ponencia que se aprobará sin sustos y que ha contado con una participación anchísima por parte de la militancia: el texto final incluye más de 400 enmiendas de las bases, expuestas y debatidas en una veintena de congresos sectoriales y territoriales. Unas enmiendas que según ERC lo que han hecho es sumar en positivo y mejorar el texto, coordinado por Raül Romeva, que considera que el hecho que la participación sea alta "es un buen indicador de la salud del proyecto".

Más allá de la vía negociada, los republicanos también incluyen en su documento estratégico la necesidad de fortalecer el movimiento independentista y los consensos en torno al referéndum y la amnistía, y también añaden la necesidad de trabajar en la construcción de espacios de soberanía en paralelo al proceso de negociación con el estado, unos espacios pero que no están detallados ni concretados. Lo que hay también en el documento es una mirada muy larga, y es que los republicanos hablan de retos para 2030 y 2040.

Horizontes

Para el año 2030 apuntan seis objetivos estratégicos que quieren ver alcanzados, como una ciudadanía republicana, empoderada, libre, crítica y comprometida que vele por el bien común; una nación diversa, feminista, internacionalista, intercultural; una sociedad del bienestar consolidada; un país en red donde haya equidad territorial; un sistema descarbonizado y vivo; y, finalmente, un modelo de sistema económico basado en la economía del bien común.

Es mirando en el 2040 que hablan de la independencia: "Nuestra capacidad para definir los Països Catalans del 2040, y más allá, dependerá de que tengamos claro hoy cómo queremos que sean. Lo que está claro es que este horizonte pasa necesariamente por haber alcanzado la independencia, y estamos convencidos de que con los retos planteados y con la apuesta estratégica que hemos emprendido nuestro objetivo ya será una realidad". En cualquier caso, sitúan que el horizonte 2040 tiene que ser republicano y progresista.

 

Una enmienda a la totalidad

En total se presentaron 512 enmiendas al texto presentado por la comisión redactora, 511 de las cuales, parciales; y una a la totalidad. 61 fueron aceptadas literalmente por la comisión redactora y 380 más fueron transaccionadas con la persona enmendadora, así que el texto final recoge más de 400 aportaciones de la militancia. Además, 11 decayeron por temas de forma y 59 fueron retiradas. Así pues, sólo queda viva la enmienda a la totalidad, que no preocupa nada a la dirección de Junqueras, ya que en los diversos debates territoriales se ha demostrado que no reúne bastante apoyo.

¿De qué enmienda se trata? Es una enmienda presentada por un pequeño sector crítico de ERC, conocido con el nombre Col·lectiu Primer d'Octubre, un grupo de republicanos que reclaman que la estrategia pase por la vía unilateral y mantener la legitimidad del mandato del 1 de octubre. El escrito alternativo que presentan, con el nombre 'Recuperem ERC', propone un cambio de rumbo en la estrategia de los republicanos abandonando los intentos de negociación con el estado.

 

El giro al diálogo en la ponencia de 2019

La apuesta para el diálogo ya estaba presente en la última ponencia política de los republicanos, que se aprobó en diciembre de 2019 y que llevaba por nombre 'Fortalezcámonos para volver; fortalezcámonos para ganar'. Aquel documento apuesta por el diálogo y no renuncia a ninguna vía para llegar a la independencia, completamente en sintonía con el nuevo documento que debatirá la militancia este fin de semana. Aquel texto de entonces consolidaba los giro de los republicanos situando el diálogo y la vía negociada como opción prioritaria para llegar a la independencia. Aunque el texto, una vez negociado y transaccionado con la militancia, dejaba la puerta abierta a otros escenarios "democráticos" y "pacíficos", relegaba la vía unilateral –sin mencionarla– a la última de las opciones.

A pesar del cambio de forma y actualización en el 2022, el fondo de la ponencia actual es bastante similar al anterior. Es así como los republicanos indican que, en paralelo a reforzar el diálogo, aseguran que no renunciarán a ningún instrumento democrático para llegar a la República catalana: "Desde acciones de desobediencia política y social hasta acciones de desbordamiento democrático para hacer posible el derecho a la autodeterminación".

Programa

Más allá de la votación de la ponencia los republicanos aprovechan este fin de semana para escuchar a sus principales dirigentes y también para debatir entre la militancia cuestiones estratégicas a partir de varios ponentes. Este sábado, después de constituirse la mesa de la conferencia, tomará la palabra Pere Aragonès. Su intervención estaba programada inicialmente para el domingo, pero se ha hecho un cambio de agenda a fin de que pueda asistir a la conferencia de presidentes en La Palma. Después de Aragonès tomará la palabra por vía telemática la secretaria general Marta Rovira. A puerta cerrada los militantes republicanos empezarán los debates internos. La conferencia del sábado será sobre la resolución de conflictos políticos y contará con los ponentes Arnaldo Otegi (Bildu), Declan Kearney (Sinn Féin) y Marta Rovira. Después, Romeva presentará la ponencia a los militantes y se votarán las enmiendas.

El domingo la sesión empieza con una nueva mesa redonda con el nombre 'Transformar el presente para construir el futuro'. Participarán la consellera de Igualdad y Feminismos Tània Verge, el secretario de Política Lingüística de la Generalitat Francesc Xavier Vila, el diputado y exconseller de Asuntos Sociales Chakir el Homrani, la diputada que estuvo en el exilio Meritxell Serret, la secretaria de Acción Climática del Govern Anna Barnadas y el líder de ERC en el Ayuntamiento, Ernest Maragall. Después ya en abierto intervenderá a la secretaria general, Marta Vilalta. Acto seguido se procederá a la votación de la ponencia política y la clausura, una vez aprobado el documento, será a cargo del presidente del partido, Oriol Junqueras.