"Seguro que hay un antes y uno después de este día". Así lo ha asegurado la portavoz de ERC, Marta Vilalta, después de que JxCat haya consumado el pacto con el PSC a la Diputación de Barcelona, que ha llevado a Núria Marín a la presidencia del ente supramunicipal.
En declaraciones en el Parlament, Vilalta ha asegurado que es un "día decepcionante para el país" y ha reprochado que JxCat pudiendo escoger entre ERC y el PSC, haya escogido el partido del 155". "JxCat tendrá que dar muchas explicaciones", ha afirmado Vilalta.
Sin embargo, los republicanos defienden que siguen "al pie del cañón" para "reconstruir las confianzas que haga falta" y la "unidad independentista", y aseguran que seguirán "al servicio del país" y siendo "el socio más leal de Catalunya".
Preguntada por los efectos que puede tener dentro del Govern, dónde comparten ejecutivo con JxCat, Vilalta ha reconocido que "todo tiene efectos en todo", pero ha defendido que es el Govern quien tiene que valorarlo. Preguntada por la posibilidad de nuevas elecciones, Vilalta ha pedido no avanzar a los acontecimientos.