Desde Esquerra Republicana se habrían pagado hasta 50.000 euros, fraccionados en diez facturas a la empresa vinculada al partido Relevance, a los jóvenes que engancharon los carteles vejatorios contra el expresident de la Generalitat Pasqual Maragall y su hermano y candidato a la alcaldía de Barcelona por ERC, Ernest Maragall, con el mensaje 'Fuera el alzhéimer de Barcelona'. Así se desprende de la investigación que de la Unidad Central de Odio y Discriminación de los Mossos d'Esquadra, una documentación que ha avanzado este sábado La Vanguardia. Desde el partido, sin embargo, niegan de manera tajante cualquier pago para silenciar el caso de los carteles y alertan que todo ello podría tratarse de "un intento de chantaje" que, aseguran a través de un comunicado emitido ad hoc, esperan "poder esclarecer".

Los tres jóvenes, Gerard F., Gerard O. y Pau J., vecinos de Igualada, habían sido identificados por parte de los Mossos d'Esquadra en el marco de la investigación de oficio por presunto delito de odio. Se les había visto por una cámara de seguridad y después acudieron a declarar ante la policía catalana. Según la declaración de Pau J., Gerard F. les habría ofrecido a él y al otro joven unos 300 euros a cada uno para ayudarlo a colgar los carteles, a petición de un "político de ERC", que cuando trascendió la identidad de los jóvenes les habría dado 3.000 euros más para que estuvieran "tranquilos y callados", apunta el citado diario. También habría dado un teléfono móvil de alta gama al joven intermediario, para comunicarse.

Los tres jóvenes fueron citados como investigados, y ante el juez, Gerard F. declaró que la acción se la encargó un conocido de Igualada, sin más detalles, y tiempo después Pau J. volvió a comparecer voluntariamente delante de los Mossos para comunicar que el encargo lo había hecho un "dirigente de ERC". Sin que el joven intermediario diera ningún nombre, la policía llegó a identificar que el móvil se lo había dado un tal Víctor L.G., también de Igualada, según apunta la investigación a la que ha tenido acceso La Vanguardia.

Facturas falsas

Entonces, el juez ordenó investigar los teléfonos móviles de Gerard F. y Víctor L. y se obtuvo toda la información clave que confirma el contacto para hacer el encargo y los pagos. Después de que salieran sus fotos, los jóvenes habrían pedido más dinero para estar callados, mil euros para cada uno. Víctor L. habría hecho a Gerard F. darse de alta como autónomo y facturar en la empresa Relevance Marketing SL diez facturas falsas, con su detalle de IRPF e IVA bien calculado, por unos supuestos servicios inexistentes. En suma, 50.000 euros que los tres jóvenes habrían cobrado, para comprar su silencio.

Los republicanos lo niegan

Por su parte, desde ERC niegan los pagos. "A raíz de las informaciones aparecidas este sábado desde Esquerra Republicana queremos reiterar que en ningún caso se ha hecho ningún pago para silenciar la acción de los carteles ni la elaboración de presuntas facturas falsas", afirman los republicanos a través de un comunicado. El partido reitera que "todos los trabajos" que puedan encargar para su tarea política se hacen "pagando a proveedores de forma transparente" y alertan de que todo podría tratarse de "un intento de chantaje" que, aseguran, esperan "poder esclarecer". Además, los republicanos afirman que siguen investigando el episodio de los carteles, sobre los cuales el partido ha reiterado "la más absoluta condena". En este sentido, esperan "tener las conclusiones cuanto antes mejor" y afirman que quieren esclarecer el caso y las circunstancias que lo rodean "de manera ejemplar".