Contundente respuesta de ERC a la designación escogida por Junts para participar en la mesa de diálogo: "Cuando se ha hablado de cuál sería la delegación, siempre se ha dicho de que sería de gobierno a gobierno. Y eso lo saben todos los dirigentes de Junts".
Esto ha afirmado la portavoz de los republicanos, Marta Vilalta, en la rueda de prensa que ha celebrado este martes por la tarde desde el Parlament, en la cual ha reconocido que si bien es cierto que al acuerdo de Govern no es explícito que los miembros de la delegación tengan que ser miembros del Ejecutivo, sí que se pactó así en el proceso negociador previo al encuentro con el Estado.
En este sentido, Vilalta ha pedido "explícita lealtad al proceso negociador" y ha recordado a Junts que prometió que su "escepticismo no sería un impedimento para poder trabajar con confianza y lealtad". "Y eso no es lo que hemos visto en las últimas horas", ha añadido.
"Sentarse de gobierno a gobierno nos da una fuerza brutal"
La líder republicana ha confirmado que la reunión con el Estado se celebrará y que la delegación de los consellers republicanos asistirá, haga lo que haga Junts. Sin embargo, Vilalta ha suscrito las palabras del president de la Generalitat, Pere Aragonès, asegurando que la puerta todavía está abierta.
"Sentarse de gobierno a gobierno nos da una fuerza brutal. Esto es lo que no queremos desperdiciar de ninguna de las maneras. Confiamos en que los consellers de Junts se incorporen en las próximas horas. No podemos regalar división interna a nuestros adversarios. Hace falta respetar los acuerdos y cerrar filas", ha reivindicado.
En estos sentido , Vilalta ha asegurado que "no explorar el máximo margen en esta mesa es rendirse". "No tenemos ninguna duda que negociar con el Estado genera escepticismo, también entre nosotros. A pesar de eso entendemos que tenemos una oportunidad. Apelamos a la responsabilidad política en este momento histórico. Tenemos la oportunidad de defender la amnistía y la autodeterminación", ha instado.
"Lealtad al president y al país"
Sobre la delegación de Junts, Vilalta, más allá de exigir "lealtad al president Aragonès y al país", también ha reprochado que "no es el momento de frivolidad ni de maniobras para hacer fracasar esta mesa de negociación". Es hora de la máxima responsabilidad institucional y de ser leal con los acuerdos que tenemos suscritos. Tenemos que representar al país, no a los partidos", ha afirmado.
Para los republicanos, tal y como ha reiterado la misma Vilalta, "la mesa de diálogo es una oportunidad histórica que no podemos dejar pasar". "Tenemos un proceso de negociación que es extremadamente complejo y complicado y sólo lo podemos afrontar si desde Catalunya vamos a la una", ha sentenciado.