La supuesta implicación del exdiputado socialista Juan Bernardo Fuentes Curbelo, conocido como el 'Tito Berni', en el caso Mediador empieza a contaminar la precampaña de las elecciones municipales y autonómicas de esta primavera. Y de paso se ha convertido en munición para la mayoría de formaciones, desde la oposición a los socios habituales, que reclaman al PSOE que no le tiemble la mano ante la presunta trama corrupta que está investigando la justicia y que salpica a uno de los territorios bandera para Pedro Sánchez, las Islas Canarias. En este sentido, Esquerra, Junts, el PDECAT y la CUP se han alineado con el resto y han urgido al PSOE a dar explicaciones para eliminar cualquier sombra de duda. En este alboroto, el Partido Popular (PP) ha encabezado la ofensiva parlamentaria registrando preguntas y comparecencias de ministros.
Para Esquerra, Gabriel Rufián ha sido más claro que el agua. "Votaremos a favor de una comisión de investigación", ha señalado Rufián en rueda de prensa desde el Congreso, donde ha tildado la trama de "corruptela". El portavoz republicano ha añadido que estos casos de "corrupción" se explican por gobiernos monocolores que han durado "muchos años" y los ha comparado con los que han vivido el PP, al PSOE o la misma Convergència. "Forma parte de la historia democrática y no democrática de este país", ha acabado. En la misma línea, la CUP tambien ha confirmado a ElNacional que darían apoyo a una iniciativa de estas características si se plantea. Desde Junts, fuentes del grupo parlamentario apuntan a este medio que valorarán seriamente la posibilidad de sumarse a una hipotética comisión aunque no lo tienen decidido.
Hay partidos que no quieren correr tanto y reclaman ir paso a paso. Según el portavoz del PDECAT, Ferran Bel, el grupo parlamentario socialista tendría que depurar responsabilidades "oportunas" por el escándalo antes de que el Congreso constituya una comisión de investigación. Aunque no ha descartado esta posibilidad, Bel ha recordado que primero se tienen que desarrollar otras comisiones ya aprobadas y que no se han puesto en marcha, haciendo referencia a la de la Operación Catalunya, que está encallada desde septiembre del 2022 a pesar de las nuevas informaciones que han aparecido este martes.
La ofensiva parlamentaria la han liderado el PP, Vox y Ciudadanos, que no han tenido miramientos y han aprovechado la ocasión para desgastar al PSOE, a tres meses del doble examen de electoral del 28 de mayo. Desde el Mobile World Congress (MWC), el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, ha pedido al PSOE que explique "exactamente qué es lo que pasa y cuántas personas" participaron en el escándalo. En este sentido sus compañeros parlamentarios han registrado la comparecencia de los ministros Nadia Calviño, Margarita Robles y Fernando Grande-Marlaska, a la vez que han anunciado una batería de preguntas a cada departamento. Tanto Vox como el PP han oficializado que se presentarán como acusación popular en la causa que se está investigando.
El PSOE y La Moncloa, "fulminantes y con determinación"
La trama 'Mediador', que por ahora ha provocado la dimisión del diputado sospechoso, está siendo un misil a la línea de flotación de los socialistas. Este martes el principal partido de gobierno ha tenido que parar los golpes para evitar que la onda expansiva fuera más destructiva. El argumento con que se han defendido es que el PSOE ha actuado rápido. En La Moncloa están más que convencidos del bueno hacer. "Cuando alguien no tiene nada que ocultar, se actúa rápido", han asegurado desde el complejo presidencial. Fuentes gubernamentales destacan que la reacción ha sido actuar de "forma fulminante y con determinación" para cortar de raíz cualquier sospecha de prácticas corruptas que puedan perjudicarlos. Desde el Congreso, los socialistas también tienen la convicción de que no hay ningún diputado más salpicado por el caso más allá de Fuentes Curbelo. El portavoz, Patxi López, se ha enfrentado a un interrogatorio complicado por parte de los periodistas. Por lo que saben ahora, ha explicado, no ha habido ningún parlamentario más que haya incurrido en "comportamientos deshonestos" y " se hayan deslizado por la pendiente de la corrupción". El exlehendakari ha adelantado que si aparece otro será expulsado del partido.
Grandes fiestas para conseguir privilegios
El sumario del caso Mediador indica que Juan Bernardo Fuentes, exdiputado ya del PSOE en el Congreso, utilizaba la cámara baja para captar empresarios y prometerles privilegios. La trama, presuntamente liderada por él, el general de la Guardia Civil Francisco Espinosa y el empresario canario Antonio Navarro Taraconte, pedía un "peaje económico" de 5.000 euros a empresarios captados bajo la promesa de obtener privilegios en materia de contratación pública. Según la investigación, se reunían con estos empresarios en el Congreso de los Diputados y en la sede de la Guardia Civil en Madrid para aparentar "seriedad" y acababan en "grandes fiestas" en clubs y hoteles con una media de gasto de unos 3.000 euros.