Después de ostentar el poder hegemónico en Catalunya durante décadas, Convergència i Unió (CiU) acabó desapareciendo como tal para dejar paso a nuevas formaciones que, a medida que han ido pasando los años, han ido multiplicándose.

Esta última legislatura marcada por la represión del Estado, las batallas entre socios de Govern y la falta de una estrategia unitaria dentro del independentismo, ha acelerado este proceso dejando un total de tres candidaturas 'postconvergentes' para las próximas elecciones en el Parlament y dos más fuera del proceso electoral.

Ahora bien, no todas las listas son iguales. De hecho, todas las encuestas hechas estos últimos meses dejan bien claro que mientras Junts opta a la victoria junto con ERC y el PSC, ni el PDeCAT ni el Partit Nacionalista Català (PNC) -impulsado por la exsenadora Marta Pascal- tienen opciones reales de entrar en la cámara catalana.

Imagen de un acto preelectoral de Junts con la candidata, Laura Borràs, y el presidentPuigdemont / Foto: Efe

Mientras las encuestas publicadas este mismo lunes por los diarios La Razón y El Español ni mencionan ninguno de los dos partidos, una difundida por Electomania el pasado viernes sí que lo hace para descartar que entren en el Parlament, junto con otras nuevas formaciones independentistas como Primàries y el Front Nacional de Catalunya (FNC).

Peores son las expectativas que les dio el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), que en el último barómetro publicado la semana pasada no sólo no les dio ningún escaño, sino que los dejó con menos intención de voto que el PACMA: el partido animalista.

Marta Pascal es la impulsora y líder del PNC / Foto: Europa Press

Sólo una encuesta publicada por La Vanguardia a principios de enero daba la opción a la formación presidida por David Bonvehí de entrar en la Cámara con una horquilla de entre ninguno y un escaño. Y si bien el PNC es un partido nuevo, el PDeCAT ha recogido buena parte de la herencia de CDC, contando en las listas con la exvicepresidenta Joana Ortega como número 2 y el exconseller Andreu Mas-Colell y el expresidente del Parlament Joan Rigol cerrándolas de manera simbólica. También el president Mas ha mostrado su apoyo al partido.

Además, el PDeCAT también contará a la lista con una veintena de candidatos de Convergents después de que ambas formaciones llegaran a un acuerdo. Convergents es el partido impulsado por el exconseller Germà Gordó, imputado por la presunta financiación ilegal de CDC.

La Lliga y Lliures: fuera de los comicios

Pero más allá de las candidaturas de la exconsellera Àngels Chacón y la excoordinadora del PDeCAT Marta Pascal están las escisiones que no han podido ni presentar la suya a las elecciones. Se trata de la Lliga Democràtica y Lliures.

La líder de la Lliga, Astrid Barrio, y el líder de Lliures, Antoni Fernández Teixidó / Foto: Sergi Alcàzar

Las dos primeras intentaron hasta el último momento un acuerdo con el PSC que les permitiera tener presencia en la lista encabezada por Salvador Illa y no las obligara a presentarse en solitario. De hecho, es exactamente lo que consiguió ahora hace tres años Units per Avançar, escisión de UCD liderada por el exconseller Ramón Espadaler, que ha renovado el acuerdo con los socialistas para la próxima legislatura. No han tenido la misma suerte la Lliga y Lliures, que finalmente no han llegado a un acuerdo ni tampoco se han decidido a presentarse en solitario. Curiosamente, la Lliga es una de las formaciones que presentó un recurso para suspender el aplazamiento de las elecciones.

Las escisiones de Unió

Como se ha mencionado, Units per Avançar ha conseguido tener presencia en el Parlament gracias a un acuerdo con el PSC que ha podido renovar para esta nueva legislatura. Un caso similar es el de Demòcrates, la escisión independentista de UDC que obtuvo dos diputados en el 2017 a través de un acuerdo con ERC. Para el 14-F, la formación se ha integrado en las listas de Junts, con su portavoz, Asunción Lailla, en el lugar 16 y su líder, Toni Castellà, en el 25.

 

Imagen principal: El pesident Mas y la exconsellera Chacón / PDeCAT