Eslovenia ha citado al embajador español a consultas después de la polémica generada por la vinculación de la 'vía eslovena' a la independencia con la violencia, según ha adelantado el diario esloveno DELO y han confirmado fuentes diplomáticas eslovenas a la ACN -aunque estas últimas han preferido no precisar si el embajador va a la cita convocado o por iniciativa propia.
El ministerio de Asuntos Exteriores esloveno recibirá al diplomático español el miércoles en su sede para "intentar explicar" que el camino hacia la independencia de los eslovenos "no fue un acto violento" sino que se vieron obligados a defenderse ante los ataques del ejército federal de Yugoslavia. "Es comprensible que sea un tema difícil para España, pero es totalmente erróneo tergiversar la vía eslovena, que realmente fue un modelo de cómo hacer la independencia de manera pacífica y democrática", han asegurado fuentes diplomáticas eslovenas.
Por su parte, el Ministerio de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación ha afirmado este miércoles que el embajador español en Eslovenia no ha sido convocado por el Gobierno de Liubliana, sino que mantendrá varias reuniones con interlocutores de este país a petición española.
Fuentes del gobierno esloveno ya habían mostrado a la ACN este martes su desacuerdo con las vinculaciones de su proceso de independencia y la violencia, asegurando que "la única violencia" fue provocada por "la agresión armada" del ejército federal y que la "vía eslovena es la vía del estado de derecho".
El viaje del presidente Quim Torra a Eslovenia y la polémica generada por sus palabras sobre seguir la 'vía eslovena' han generado "malestar" en Liubliana, según han admitido fuentes diplomáticas del país balcánico.
En la reunión del miércoles en el ministerio, el gobierno esloveno trasladará a la diplomacia española que el país vivió un "ataque" de las fuerzas del ejército de Milosevic y que el único acto "ilegal" fue aquella "agresión", y reiterará que el proceso, desde el punto de vista esloveno, fue modélico y legal.
Además, fuentes diplomáticas apuntan que eso son "hechos" y que durante la reunión el embajador español tendrá que escuchar "otra vez" los argumentos, que Liubliana defiende desde hace tiempo cuando se buscan comparaciones entre Catalunya y su proceso de independencia y se mezclan argumentos sobre la violencia.