A pesar de la magnífica puesta en escena de este jueves, España y Francia no han conseguido ponerse de acuerdo en uno de los aspectos más importantes de su relación bilateral. Los dos países no han acordado una apertura de todos los pasos fronterizos que el país de Emmanuel Macron mantiene cerrados desde 2019. De hecho, ambas delegaciones han pactado este jueves en Barcelona crear un grupo de trabajo para abordar la cuestión de los ocho pasos fronterizos secundarios que se mantienen cerrados por voluntad del ejecutivo francés.
Macron ha negado que mantener estos pasos fronterizos cerrados vulnere de alguna manera el acuerdo de Schengen, y lo ha atribuido todo a motivos de seguridad. De hecho, ha puesto sobre la mesa el atentado de Niza de 2016, que en aquel momento se encontraba en una situación irregular en su país, y que provenía de Italia. "Son procedimientos excepcionales que se justificaban por circunstancias en las fronteras española e italiana", ha afirmado, además de querer poner en valor que desde Madrid y París se quiere trabajar por "una cooperación y eficacia en la lucha común contra quien organiza la emigración clandestina y el tráfico de personas".
Ha sido el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien ha informado de que la cuestión seguirá avanzando en un grupo de trabajo pactado entre los Ministerios del Interior de los dos estados. Macron ha apostado en la rueda de prensa posterior a la cumbre hispanofrancesa por "mejorar la cooperación" entre las dos administraciones y plantear "soluciones operativas" en favor de incrementar la seguridad en los pasos fronterizos.
Macron esquiva la oficialidad del catalán
Por otra parte, los periodistas le han preguntado a Macron sobre su posición respecto de la oficialidad del catalán en las instituciones europeas. Ha esquivado dar su opinión sobre esta cuestión, y ha pedido respetar las constituciones de cada país. Así pues, ha señalado que Francia, de la misma manera que España, tiene "especificidades culturales y lingüísticas" en algunos territorios. Ha opinado que la mejor manera de tratar estas cuestiones es a través del "respeto y el reconocimiento", pero no se ha mojado nada más que eso. Aunque es uno de los aspectos que el president de la Generalitat, Pere Aragonès, pidió que se tratara en este encuentro bilateral, Macron ha evitado pronunciarse sobre la cuestión.
Los Estados Unidos y la Unión Europea, en competición por la energía verde
Macron, por otra parte, ha instado a la Unión Europea a espabilarse y apostar por la energía verde, ya que las ayudas que la administración de Joe Biden hace por las empresas de los Estados Unidos que apuestan por este tipo de energía pueden traducirse en una desindustrialización de Europa. La UE, según él, tiene que seguir siendo "un lugar de prosperidad".
Financiar el choque energético y de la guerra con fondos europeos
Uno de los pactos a los cuales han llegado franceses y españoles en este encuentro en la capital catalana ha sido el de crear un fondo financiado con deuda europeo para combatir los efectos de la invasión rusa en Ucrania y la consecuente crisis energética. Macron ha negado que se trate de un tema "tabú" y ha pedido a los estados europeos que vean con buenos ojos este tipo de políticas.