De Madrid a Bruselas. España ha propuesto oficialmente a la actual vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, como candidata a comisaria europea del nuevo ejecutivo presidido por Ursula von der Leyen. Según ha adelantado la Agencia EFE y ha confirmado ElNacional.cat, el Gobierno ha enviado este miércoles por carta la candidatura de Ribera, que fue la cabeza de lista del PSOE en las elecciones europeas del pasado mes de mayo (en las cuales los socialistas perdieron ante el PP) aunque nunca llegó a recoger el acta de eurodiputada. Desde el primer momento, era la gran favorita para la candidatura española y ahora se han cumplido las quinielas.
El paso que ha dado hoy el Gobierno era un requisito formal por el que había tiempo hasta el viernes 30 de agosto, según señalan a este medio fuentes del entorno de Teresa Ribera. En los próximos días, Ursula von der Leyen, que quiere que la Comisión Europea sea paritaria, decidirá qué cartera en concreto asigna a Rbiera y hará pública su propuesta íntegra de reparto de carteras y comisarios. Posteriormente, previsiblemente el mes de octubre, tendrán lugar los hearings, los exámenes que tendrán que pasar en el Parlamento Europeo todos los nombres propuestos.
En un breve vídeo remitido a los periodistas, Teresa Ribera reconoce que es un “orgullo” y un “gran honor” que Pedro Sánchez haya propuesto su nombre para pasar a formar parte de la Comisión Europea. “Es un momento importante para Europa, donde tenemos que trabajar juntos para hacer realidad el sueño europeo”, ha defendido. Y se ha mostrado convencida de que el nuevo Colegio de Comisarios hará frente a los “grandes desafíos del momento” para hacer realidad un “continente de progreso, prosperidad y bienestar para todos los ciudadanos”.
Ministra desde que Pedro Sánchez llegó a la Moncloa
Teresa Ribera es una de las pocas figuras que continuaban en el Consejo de Ministros desde que Pedro Sánchez es presidente del Gobierno: en 2018, la nombró ministra para la Transición Ecológica, una posición que ha mantenido hasta la actualidad. Como ministra, ha impulsado la ley de cambio climático y transición energética, ha promovido las energías renovables y ha trabajado para la descarbonización. También ha liderado la conocida como excepción ibérica, que permitió controlar el precio de la electricidad en la península en un momento de gran inflación. Además, influyó en la reforma del mercado eléctrico en Europa y negoció con la Junta de Andalucía, gobernada por el PP, la protección y la renaturalización del Parque Nacional de Doñana. Ribera se afilió al PSOE en 2011, después de la victoria de Mariano Rajoy.
Después de licenciarse en Derecho en la Universidad Complutense de Madrid y especializarse en Derecho Constitucional y Ciencia Política en el Centro de Estudios Constitucionales, con 26 años se convirtió en Administradora Civil del Estado e inició carrera como funcionaria pública, siempre atada al ámbito medioambiental. Así, primero trabajó en el Ministerio de Obras Públicas, Transporte y Medio Ambiente en varias posiciones técnicas relacionadas con la gestión del agua. Su tarea dentro de la administración del Estado la llevó en 2004 a dirigir la Oficina Española de Cambio Climático, posición que ocupó cuatro años, cuando fue nombrada secretaria de Estado de Cambio Climático durante el segundo gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.