Seis exconsellers de Junts per Catalunya se han reunido este miércoles por la mañana en Bruselas con el president en el exilio, Carles Puigdemont. También ha asistido el secretario general de la formación, Jordi Turull. Hacia el mediodía, se ha sumado a la cumbre el eurodiputado de Junts i Lliures per Europa, Toni Comín. El encuentro ha contado con la presencia de Jordi Puigneró (exvicepresident del Govern y conseller de Polítiques Digitals i Territori), Jaume Giró (exconseller de Economia i Hisenda), Victòria Alsina (exconsellera de Acció Exterior i Govern Obert), Violant Cervera (exconsellera de Drets Socials), Gemma Geis (extitular de Universitats i Recerca y, muy probablemente, alcaldable del partido en Girona) y Lourdes Ciuró (exresponsable de Justícia). Así pues, de los consellers que formaron parte del Govern de ERC y Junts entre mayo de 2021 y octubre de 2022, sólo no ha podido ir Josep Maria Argimon (extitular del Departament de Salut) por motivos personales, según han detallado.
Desde Junts per Catalunya, explican que la reunión "ha servido para analizar la situación política actual" y también con la mirada puesta en "preparar la estrategia a seguir en los próximos meses", teniendo en cuenta que en medio año habrá las elecciones municipales. Paralelamente, en el encuentro se ha abordado "la situación del exilio". Sobre la estrategia política, hay que apuntar que Esquerra Republicana mantiene la presión sobre Junts para aprobar los presupuestos de 2023. En este sentido, el viernes habrá una reunión técnica del Govern con una delegación del partido, pero no asistirán ni la consellera de Presidència, Laura Vilagrà, ni la titular de Economia, Natàlia Mas. El partido sostiene que actuarán "con responsabilidad" y que trabajarán "con seriedad". Tienen previsto asistir a las reuniones que se les convoque, pero reclaman "más concreciones" en la negociación. Esta misma semana, Jaume Giró apuntaba en una entrevista a La Vanguardia que los presupuestos de 2023 ya no son los suyos porque "ha cambiado la estructura y las partidas de cada departamento", pero se mostraba partidario de la aprobación de las cuentas con el objetivo que "las necesidades de la gente queden satisfechas".
"Preocupación" por la reforma del delito de sedición
Otro debate que ocupa la agenda de la actualidad es la reforma del delito de sedición. En este terreno, Junts ha manifestado su "preocupación" por la "ambigüedad" que ve en los conceptos del delito de desórdenes públicos agravados por la "limitación que pueden tener aquellos que quieren seguir luchando por los derechos fundamentales". El martes, la portavoz de la formación en el Congreso de los Diputados, Míriam Nogueras, avisaba de que no serán "cómplices ni del blanqueo de los socialistas y del Estado español ni tampoco de facilitar la extradición" de Carles Puigdemont, en línea con lo que ha declarado la vicepresidenta primera del ejecutivo estatal, Nadia Calviño, que subrayaba en unas declaraciones que el objetivo de la reforma es "que vuelva" el president en el exilio.
Todavía sobre este cambio legislativo, el grupo parlamentario de Junts en el hemiciclo español presentará un texto alternativo a esta proposición de ley que sólo incluya la derogación de la sedición. Josep Rius lo explicaba en una entrevista en el Cafè d'Idees de La 2 y Ràdio 4, en la línea de lo que se hizo cuando se suprimió el delito de insumisión: "Se derogó este artículo y se previeron los efectos. Las causas abiertas quedaron archivadas y los antecedentes penales quedaron borrados".