Quien era director general de los Mossos en el 2017, Pere Soler, considera que el Estado "no ha cerrado bien" la relación entre el CNI y el imán de Ripoll, una polémica que se ha vuelto a reavivar en los últimos días a raíz de las palabras del comisario Villarejo en que asegura que "el CNI calculó mal las consecuencias de dar un pequeño susto a Catalunya". Soler ha denunciado en una entrevista al programa FAQS de TV3 que el Congreso no ha querido hacer una comisión de investigación de los atentados a Catalunya y que los representantes del Estado no fueron a la que se abrió al Parlamento.

"No se quiere abordar este tema con profundidad. Y no se abre una investigación en el Congreso, como se hizo con los atentados del 11-M. Eso hace que cuando Villarejo hace estas declaraciones tengan una cierta credibilidad porque la cuestión no está cerrada por buena parte de la sociedad catalana", ha asegurado. De hecho, Soler considera que el Estado comete el error de pensar que "con la comparecencia de Sanz Roldán (entonces director del CNI) en el Congreso en la comisión de secretos oficiales en que participan mucho pocos diputados que tienen el deber de guardar secreto el asunto queda cerrado". Nada más lejos de la realidad, cree al exdirector general de los Mossos: "no queda cerrado porque los representantes del Estado hacen que este tema no se quiera abordar en profundidad".

"Nadie nos ha dicho nada"

Con todo, Soler ha asegurado que no le daría "ninguna credibilidad" al excomisario, que hizo estas declaraciones en el juicio por el caso Tándem. Ahora bien, entiende que esta falta de voluntad de transparencia del Estado provoca que cuando Villarejo hace estas declaraciones "con ánimo de perjudicar a sus excompañeros del CNI", parezcan verosímiles.

Por otra parte, Soler también explica que el CNI nunca informó los Mossos sobre su relación con el imán de Ripoll. "Lo único que se ha reconocido desde el servicio de inteligencia ha sido este contacto. Hasta donde llegaron, si estaban monitorizados, si no, si era un confidente, si había contrapartidas... Todo eso no se ha sabido en certeza. Puede haber indicios, pero a nosotros nadie nos ha dicho nada", ha narrado. Además, también ha lamentado que, aunque se ha acabado corrigiendo, "los Mossos no teníamos información de Europol, recibíamos muy pocos datos, sobre el imán no nos informaban nunca".

Un servicio de inteligencia para Catalunya


Ante esta situación, Soler ha explicado que se ha intentado en varias ocasiones tener un servicio de inteligencia propio en Catalunya: Las policías tienen muy acotadas los trabajos y los servicios de inteligencia tienen unas maneras de actuar que no están tan acotadas protocolaria o reglamentariamente. Yo siempre he defendido que los catalanes tendríamos que tener un Estado, y si somos un Estado necesitamos un servicio de inteligencia", ha concluido el exdirector general de los Mossos.

Aunque por toda España las declaraciones de Villarejo no provocaron casi ninguna reacción, en Catalunya estas han supuesto una sacudida importante, ya que el excomisario señaló directamente el CNI como responsable de los atentados del 17 de agosto de 2017 en Barcelona y Cambrils. El día siguiente, quiso matizar sus palabras, y aunque insistió en esta relación, aclaró que la intención nunca fue provocar un atentado, sino "provocar una sensación de peligro" y que Catalunya sintiera la necesidad de protección del Estado.