El Gobierno ha nombrado a la exministra de Educación y Formación Profesional a Isabel Celaá Diéguez embajadora de España ante la Santa Sede, en sustitución de María del Carmen de la Penya, según se ha publicado este miércoles en el Boletín Oficial del Estado (BOE). Celaá abandonó el Gobierno el mes de julio después de la remodelación de Sánchez. A lo largo de su carrera política ha sido portavoz del Gobierno, diputada del PSOE en el Congreso de los Diputados en las XIII y XIV Legislaturas y parlamentaria por el mismo partido en el Parlamento vasco. También ha sido consejera de Educación, Universidades e Investigación del País Vasco, vicepresidenta del Parlamento Vasco y directora de gabinete del consejero de Justicia, Economía, Trabajo y Seguridad Social del Gobierno Vasco, entre otras cosas.
Confianza de Sánchez
El paso de Isabel Celaá por el ministerio de Educación dejó como principal huella la reforma de la ley educativa, la LOMLOE (también conocida como la 'ley Celaá'), que se aprobó sin el consenso general de la comunidad educativa. La Escuela Concertada fue una de las más críticas con la reforma, al considerar que recorta la libre elección de los padres a la hora de escoger el centro para sus hijos. Católica practicante, la exministra de Educación ha estado meses en la diana de la derecha española por la ley de educación con la cual el Gobierno derogó la ley Wert y que, entre otras cuestiones, ha quitado peso a la asignatura de religión en el currículum escolar porque no puntuaba para la nota media ni para tener una alternativa como sucedía hasta ahora.
El presidente de España, Pedro Sánchez, hace poco más de un mes, ya propuso renovar al embajador español ante el Papa. El jefe del ejecutivo español había sugerido a la exministra Isabel Celaá como nueva embajadora en el Vaticano. Aunque Sánchez tumbó a Celaá en la última remodelación del ejecutivo central que hizo el julio pasado. Con el objetivo de renovar caras y rejuvenecer el ala socialista del gabinete central. El presidente español ya ofreció a Celaá uno de los cargos más cotizados de la carrera diplomática. La exministra sustituirá en el cargo a María del Carmen de la Penya, una diplomática con un amplio bagaje que la llevó antes a ser embajadora en Etiopía, Seychelles, Yibuti, Qatar y como Observadora Permanente ante la Unión Africana. La que ha sido la segunda mujer en representar en España delante la Santa Sede.
Otros nombramientos
Celaá ya es el segundo exministro que Sánchez pone al frente de una embajada, ya que el pasado mes de octubre el extitular de Cultura y Deportes, José Manuel Rodríguez Uribes, fue nombrado embajador ante la Organización de la ONU para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco). El gobierno de Pedro Sánchez ha nombrado también embajadora de España en Dinamarca a la diplomática María Victoria González Román, que sustituirá a Román Oyarzun Marchesi, que ocupaba este lugar hasta ahora. Licenciada en Ciencias Políticas y Sociología, González Román estuvo destinada en las embajadas de España en Gabón, Bolivia, Bélgica y República Checa y ejerció los cargos de ministra consejera en la Misión Permanente ante la ONU y Representante Permanente ante la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), con sede en Viena. Por otro lado, a propuesta del ministro de Asuntos exteriores, Unión Europea y Cooperación, el Ejecutivo ha nombrado embajador de España en Turkmenistán a Marcos Gómez Martínez, que hasta ahora era embajador en Colombia. Gómez Martínez es licenciado en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid, ha ejercido puestos en las direcciones generales de Europa y Asuntos Consulares, así como en el gabinete del ministro. Fue también cónsul adjunto en Londres y cónsul general en Cantó (China), además de embajador de España en Nueva Zelanda, Fiyi, Tonga, Samoa y las Islas Cook.