El Ministerio de Exteriores español, desde la la Secretaría de Estado para la España Global, ha encargado en unas 200 diplomáticos mejorar la reputación de España en el mundo. Según ha informado El País, el gobierno de Sánchez quiere empezar a mejorar la imagen de España al mundo, ya que desde el Ejecutivo se considera que está deteriorada. Dos síntomas de este deterioro son la carta de los 41 senadores franceses denunciando la represión a Catalunya y la exigencia de México a España por pedir disculpas para conquista del país.
Según el Ministerio, el problema real de la diplomacia española es "la falta de anticipación" a los acontecimientos y se por eso que se han designado estas 200 personas en las principales delegaciones diplomáticas. Concretamente hay una persona encargada a cada consulado y embajada para identificar estos problemas y proponer soluciones al respecto.
Este nuevo proyecto de mejora de la imagen del Estado español, según la información de El País, se ha evidenciado cerca de la crisis con Catalunya, ya que desde Exteriores se considera que el relato independentista "ha penetrado más de lo esperado" y especialmente en el entorno europeo, un buen ejemplo sería el ridículo de Borrell en la televisión pública alemana.