El periodista Albano Dante Fachin ha manifestado en el programa Tot es mou de TV3, que el claro ganador de la reunión de la mesa de diálogo es el presidente español, Pedro Sánchez, porque ni se ha movido y "le han hecho la ola".
"Sánchez es un crac. Ha conseguido no moverse de su sitio y que le hagan la ola como si fuera un gran estadista, desde Catalunya. Todo gracias al independentismo", ha soltado.
Fachin ha insistido en que cuando se produce cualquier negociación entre partes lo primero que se hace es un cese de hostilidades, y ha dicho que eso no ha sucedido porque por la parte española la Fiscalía y la Justicia siguen actuando contra el independentismo. Ha criticado duramente al presidente Pere Aragonès y a ERC por esta manera de negociar, y ha subrayado que del documento que los republicanos pactaron con el PSOE (desjudicialización, calendario), los socialistas "no han cumplido ningún punto".
También ha criticado al secretario general de Junts, Jordi Sànchez, por criticar ahora el funcionamiento de la mesa, después de haber formalizado el pacto de gobierno con Aragonès.
Sánchez ha planteado a la salida de su entrevista con Aragonès dos ideas clave: las posiciones están "muy alejadas" y la mesa de diálogo tiene que trabajar "sin prisa pero sin pausa". Son las que ha querido trasladar Sánchez después de reunirse durante casi dos horas con Aragonès en el Palau de la Generalitat, antes de reactivar el foro de negociación entre el Estado y la Generalitat. Desde la galería gótica, el presidente del Gobierno español ha vuelto a certificar su no a las dos principales propuestas de la delegación catalana: el referéndum de autodeterminación y la ley de amnistía para los represaliados por el procés.
En rueda de prensa después del encuentro, el presidente español ya ha querido advertir, a pesar de la cordialidad, que las "posiciones están muy alejadas" y que eso requerirá tiempo. "Estamos alcanzando acuerdos sectoriales en múltiples ámbitos, pero tenemos posiciones muy diferentes en el ámbito de cómo resolver esta crisis", ha constatado el dirigente socialista. "Ni el referéndum ni la amnistía son posibles", ha asegurado, dejando claro que "el presidente del gobierno siempre respetará la legalidad democrática ni la orden constitucional". Ha ido más allá y ha advertido que "lo que sea España lo tendrán que decidir todos los españoles, no sólo una parte".
Ante eso, el presidente español ha insistido en su "agenda para el reencuentro", que ha entregado actualizada con los avances a Aragonès. Esta agenda recoge hasta 44 demandas de los presidentes Mas, Puigdemont y Torra a lo largo de la última década, menos la del referéndum. Unas demandas que "no han tenido más respuesta que el silencio" hasta ahora. Esta agenda, ha remachado, "amplía el horizonte", para que "no sólo aborda el futuro político de Catalunya, sino también ámbitos como las infraestructuras, el crecimiento económico, la educación, la sanidad o los servicios sociales".