La pax dentro del Partido Popular ha tenido hoy la imagen más visible. Compartiendo un mismo escenario, en el centro de Madrid, Alberto Núñez Feijóo e Isabel Díaz Ayuso. A un lado, el presidente de la Xunta de Galicia y único candidato a tomar las riendas del partido. En el otro, la presidenta de la Comunidad de Madrid y principal adversaria de la dirección saliente. Los dos juntos, marcando sus propios estilos diferenciados pero con buenas palabras, han sellado este martes el armisticio. Feijóo ha reivindicado a Ayuso como uno de los valores de la formación y Ayuso ha garantizado a Feijóo que forman parte del mismo "equipo".
En todo momento Feijóo ha sido el candidato de consenso, especialmente después de recibir el visto bueno de Isabel Díaz Ayuso, que hoy se ha visualizado de forma pública. "Somos una retaguardia. Somos un equipo de soldados, presidente, que te acompañaremos en este momento crítico, ha asegurado la presidenta madrileña, para después matizar: "Un equipo, como te digo, que tiene poca paciencia para las tonterías, poca resistencia para las imposiciones". Y le ha agradecido su paso adelante para coger las riendas del partido. "Nos has dado paz. A Galicia, al partido y al centroderecha", ha remachado la dirigente conservadora.
Feijóo le ha agradecido las palabras de apoyo y ha cerrado filas con Ayuso, que ha reivindicado como uno de los mayores activos del Partido Popular. El presidente virtual del Partido Popular ha devuelto también los elogios, asegurando que conoció a fondo a la presidenta madrileña durante la gestión de la pandemia, y ha destacado su "enorme fortaleza y entereza", su carácter y su personalidad: "Si te insultan tanto es porque te temen".
Estilos diferentes
Los discursos de los dos también han servido para evidenciar los estilos claramente diferenciados que representan a la hora de hacer política. Como en otras ocasiones, Alberto Núñez Feijóo ha reivindicado una "política centrada", porque "el Partido Popular siempre ha tenido la vocación de estar en el centro de la política española". Ha rechazado la "política de tribus y trincheras" y ha asegurado que su prioridad es recuperar el respeto" del PP. En este sentido, ha planteado hacer una política "firme y serena" frente a un Gobierno "que no está a la altura", sin ataques personales.
En cambio, Isabel Díaz Ayuso ha mostrado un estilo mucho más agresivo. Ha cargado contra el ejecutivo central, que ha denunciado que es "el gobierno más autoritario desde la dictadura". Y se ha reafirmado en su propuesta de la conferencia de presidentes: suprimir los 20.000 millones de euros del plan de igualdad para destinarlos a paliar los efectos de la subida de la luz. "Una mujer de Fuenlabrada que se levanta cada día a las seis de la mañana no está para recibir lecciones de Irene Montero sobre cómo ser mujer", ha lanzado.