El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha prometido este viernes que "revertirá" la reforma de la sedición anunciada por el presidente español, Pedro Sánchez, si llega a la Moncloa. En una declaración sin preguntas en la sede del PP, Feijóo ha tildado de "aberración" la propuesta registrada por el PSOE y Unidas Podemos en el Congreso de los Diputados, que considera que se ha hecho para el "beneficio exclusivo de personas concretas" y a cambio de la "supervivencia política" de Sánchez. En este sentido, ha apelado al "deber moral" de todos dirigentes socialistas para que posicionen públicamente ante esta cuestión. "O se está con los condenados y fugados, o se está con la legalidad democrática", ha espetado Feijóo.
"Como partido de estado, como partido que defiende la unidad de la nación española, que cree en la España de las autonomías y como alternativa de gobierno, esta decisión la revertiré si soy presidente del gobierno", ha prometido Feijóo que, en un intento por moderar su discurso ha matizado que defiende el diálogo, pero "sin sumisión ni claudicación".
Feijóo defiende que "la sedición debe estar en el Código Penal"
Feijóo considera que Sánchez ha superado todos los límites y que en un intento por "ganar tiempo" ha entregado "la estabilidad del país a los que quieren fracturarlo". En opinión del dirigente popular, la reforma planteada compromete la independencia judicial porque "se reescribirá la respuesta jurídica al intento de sedición del 2017". En este sentido, ha defendido que "el delito de sedición debe estar en el Código Penal" basándose en el hecho de que los partidos independentistas "todavía preconizan la secesión" y se mantienen con la idea de volver a intentarlo.
"Legislar delitos a la carta de aquellos que los han cometido y que anuncian la voluntad de reincidir es irresponsable", ha afirmado el presidente del PP, que considera el anuncio de Sánchez como una muestra que este "ha aceptado el chantaje independentista". A ojos de Feijóo, Sánchez ha hecho al independentismo demasiadas cesiones, entre las cuales ha citado los indultos, o el hecho de aceptar el catalán como única lengua vehicular en la escuela catalana, y en las que ahora añade la reforma de la sedición.