La incomparecencia de Pedro Sánchez en la tribuna de oradores en el debate de investidura ha provocado que Alberto Núñez Feijóo haya repartido los reproches al PSOE en la réplica al líder de Vox, Santiago Abascal. El jefe de filas del PP interpreta que el presidente en funciones está atado de pies y manos por Junts y ERC, y considera que el plantón es una vía para esquivar públicamente la amnistía. "Si Puigdemont dice no, usted no será presidente", ha interpelado Feijóo a su rival socialista.
A juicio de Feijóo, que el PSOE se apoye en fuerzas independentistas es una "anomalía democrática sin precedentes" que "nunca había sucedido en la historia de la democracia española". Por eso, ve que Sánchez está escondiendo la cabeza bajo el ala y está evitando referirse al debate de la amnistía que se está negociando entre Barcelona, Madrid y Waterloo. "Comprendo que Sánchez no venga aquí [a dar la réplica] porque no tiene el cuajo de presentar su proyecto político en España". En este sentido, ha considerado una "enorme descortesía" que el secretario general del PSOE haya renunciado a subir a la tribuna: "Ha venido aquí y no se ha atrevido a hablar [de la amnistía]".
Feijóo se envalentona y coge fuerzas a partir de la reclamación de un referéndum que el president de la Generalitat, Pere Aragonès, ha enviado este martes desde el debate de política general en el Parlament de Catalunya. También se ha referido a las palabras de la presidenta de la cámara catalana, Anna Erra, que ha afirmado en las últimas horas que no "le temblarán las piernas" para desobedecer el Estado si se lo reclama una mayoría catalana. "Por eso no nos quiere contestar sobre lo que quiere hacer con la amnistía", ha recriminado Feijóo. Por todo esto, el president en el exilio, Carles Puigdemont, se ha sentido interpelado en la distancia, según ha contado en la red X.
Demano la paraula per al·lusions ✋, @F_Armengol @Congreso_Es @JuntsXCat.
— krls.eth / Carles Puigdemont (@KRLS) September 26, 2023
Feijóo clama contra la amnistía
Como candidato a la investidura, Feijóo ha tenido el foco durante todo el día. No tiene límite de tiempo y puede intervenir las veces que le apetezca. Desde el primer minuto, ha hecho pivotar su discurso en torno a la amnistía que Pedro Sánchez está negociando con los partidos independentistas. A su entender, el presidente en funciones vive con la soga en el cuello por parte de Junts per Catalunya y Esquerra Republicana y, en la cámara baja, se ha comprometido a "no defenderlo". "No lo haré porque tengo principios, límites y palabra". Por eso ha apelado a la "integridad" de Sánchez para que diga basta a la exculpación de independentistas que, según ha explicado, no es "aceptable ni ética ni jurídicamente", al margen de proponer crear el delito de deslealtad institucional descartando recuperar el de sedición y endurecer el de malversación.
Desde esta mañana, Feijóo contrapone su modelo con el de Sánchez, intentándolo desgastar al máximo. En este sentido, ha recordado, él reivindica que podría ser presidente del Gobierno si hubiera aceptado las condiciones de Junts: "Tengo a mi alcance los votos para ser presidente del Gobierno, pero no acepto pagar el precio que me piden para serlo".