El expresidente del Gobierno Felipe González ha pedido este viernes respetar la presunción de inocencia del Rey emérito Juan Carlos I, que ha abandonado España, antes de dar "credibilidad" a lo que "diga una señora", en alusión a la que fuera amiga íntima del monarca, Corinna Larsen. González ha defendido el "fantástico servicio" de Juan Carlos I como jefe del Estado en una entrevista en TVE, en la que ha advertido sobre los peligros de dar por buena la información que se va conociendo sobre el Rey emérito.
"Cuando alguno da credibilidad a lo que diga un policía corrupto o una señora ligada a otro, que la dé también cuando se refiere a ellos, no vaya a ser que valga la información que den en una dirección y no valga en otra", ha avisado González, que ha asegurado que el legado histórico de Juan Carlos I no lo van a "borrar estas circunstancias".
El exjefe del Ejecutivo se ha referido así a la investigación al monarca por las supuestas comisiones cobradas por la adjudicación del AVE a La Meca a empresas españolas en 2011. A su juicio, todo esto se enmarca en una "campaña" que afecta "al régimen del 78".
En esta línea, González ha puesto de relieve el papel de Juan Carlos I antes incluso de la aprobación de la Constitución de 1978. "El Rey tuvo un comportamiento constitucional antes de que hubiera Constitución", ha asegurado, para después recordar que "depositó la responsabilidad" de gobernar en el Ejecutivo "y se replegó a una función que luego consagró" la Carta Magna.
Así, González ha reconocido que mantuvo una "relación fluida" con el monarca a pesar de ser un reconocido republicano. "La primera pregunta que me hizo fue que por qué era republicano. Nosotros éramos accidentalistas, pero la monarquía era antisocialista", ha recordado.
El expresidente ha afirmado que, cuando "eso desapareció, la aceptación de la fórmula democrática de monarquía constitucional fue válida" para los socialistas. "Yo conté con él, e hizo un servicio fantástico a España", ha apostillado.