Como cada 8 de marzo, miles de mujeres han salido a las calles de Catalunya a pesar de las restricciones por la pandemia de la Covid. La concentración más numerosa ha sido la de Barcelona, que ha reunido miles de mujeres en el paseo de Gracia Barcelona. Aunque ha contado con menos participación que en otros años a causa de las restricciones, ha conseguido agotar todas las inscripciones -unas 4.500- y ha mantenido el mismo ambiente reivindicativo y festivo de otros años.
Las medidas anti-Covid han obligado a las organizadoras a sustituir la tradicional manifestación por un acto en el cual era obligatorio inscribirse para participar y concentrarse en alguno de los ocho tramos en los cuales se ha dividido el paseo de Gracia, entre la Diagonal y la Gran Via de las Corts Catalanes.
Durante la concentración, las asistentes han respetado tanto las distancias de seguridad para evitar contagios como el uso de mascarilla. Además, también se han podido ver multitud de pancartas reivindicativas como por ejemplo: "Contra las violencias machistas, justicia feminista" o "Bastantes agresiones a las mujeres". También se han visto otros lemas como "La lucha es de todas" o "no Somos tan pocas, ni estamos tan solas".
Durante la hora que ha durado la concentración ha habido tiempo para representaciones teatrales, la lectura de un manifiesto, gritos reivindicativos, muchos 'selfies' y unos minutos con un mar de luces lilas con el móvil. Al final la música que se emitía desde una de las carrozas donde había un grupo de personas bailando ha convertido el Paseo de Gracia en una pista de baile improvisada durante un cuarto de hora.
En la concentración también han participado varias personalidades como la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, a la candidata de JxCat en las pasadas elecciones del 14-F, Laura Borràs, la consellera de Justícia, Ester Capella, el líder de ERC, Pere Aragonès, el conseller de Exteriors, Bernat Soler, o el secretario general de CC.OO. en Catalunya, Javier Pacheco.
Girona también sale a la calle
en Girona, unas 2.500 personas, según la Policía Municipal y los Mossos, se han manifestado por las calles de la ciudad para reivindicar el Día de la Mujer bajo el lema "Nos quieren confinadas, nos encontrarán organizadas". La movilización, convocada por la Coordinadora de Feminismos Anticapitalista de Girona, ha empezado en la plaza 1 de Octubre y ha recorrido varias calles del centro de la ciudad hasta la Delegación del Govern. Allí se ha leído un manifiesto asegurando que la lucha continúa y han denunciado que la pandemia ha "acentuado todavía más las desigualdades". También han denunciado los casos de acoso sexual destapados al Instituto del Teatro y han interpretado varias canciones de denuncia.
Durante el recorrido, cuando la marcha ha llegado a la zona de Correus ha chocado con un fuerte despliegue policial de los Mossos, que les ha impedido acceder hasta los juzgados. La situación ha generado críticas por parte de las asistentes, que han criticado el cuerpo policial para "temer" una concentración de mujeres. Y es que durante todo el recorrido las mujeres han encabezado la movilización pidiendo a los hombres que se desplazaran de la primera línea.
Lleida sale a la calle a pesar de la Covid-19
Las calles de Lleida se han vuelto a teñir de color lila con motivo del 8-M, a pesar de la Covid-19. La movilización ciudadana ha sido inferior a la registrada en años anteriores, con poco más de un millar de personas y se han vuelto a organizar dos actos por separado, uno por la Coordinadora 8-M y el otro por Marea Lila.
El primero ha sido el más multitudinario, con una manifestación que ha salido de la plaza Víctor Siurana para reivindicar un 8-M feminista, combativo y anticapitalista, bajo el lema 'El machismo no nos para, la covid-19 tampoco'. La marcha ha acabado delante la subdelegación del Gobierno, donde se ha leído un manifiesto y se ha hecho una hoguera con cajas de cartón que se han quemado con el fuego. También han quemado una banderola de Vox.
La manifestación ha recorrido varias calles de Lleida y durante el trayecto ha hecho varias paradas. En el Obispado de Lleida se han tirado cuelga ropas para denunciar los abortos ilegales, delante del Departamento de Salud han reclamado el aborto libre y gratuito con gritos y pintadas en la fachada y, finalmente, delante de la Guardia Urbana han llamado 'la policía tortura y asesina'. Durante el recorrido también han cantado 'Muerte al capital, a la iglesia y al Estado' y 'Las calles serán feministas', entre otros.
Tarragona reivindica el 8-M
Unas 500 personas se han concentrado este lunes en Tarragona para el 8-M. El acto ha sido convocado por la Plataforma 8-M del Camp de Tarragona y ha reclamado la igualdad de género, el fin de la violencia machista y el fin de la brecha salarial. También ha servido para denunciar que la pandemia ha empeorado la situación laboral de las mujeres y que muchos de los trabajos feminizados que hacen son considerados esenciales, pero no tienen el reconocimiento social y salarial que correspondería. Por el escenario que se ha habilitado han pasado grupos de teatro y de música, así como miembros del Grupo de Trabajo en Defensa de la Sanidad Pública de Tarragona, que han denunciado la precariedad laboral que sufren las mujeres que limpian los hospitales.
Las calles de Vic se llenan de clamores feministas
Las calles de Vic también se han llenado de clamores feministas para denunciar que la pandemia ha agravado todavía más las desigualdades. El pistoletazo de salida ha sido un desayuno popular y seguidamente, en la plaza de la Catedral, el Comité 8-M Osona-Lluçanès ha iniciado un pasacalle. La primera parada ha sido una actuación teatralizada para visualizar los "impactos" de la Covid-19 en la mujer y las diferentes etapas de la vida, como las cargas familiares y la cura de personas mayores.
Las asistentes al acto también llevaban carteles con mensajes como ahora "Sin las mujeres no hay revolución" o "La mujer es la vida" y han cantado proclamas como "Viva la lucha feminista". Una de las miembros del Comité 8-M, Anna Carrera, ha subrayado que la pandemia ha agravado todavía más las desigualdades entre hombres y mujeres y que este año había que salir una vez más en la calle para representar también a aquellas mujeres que no lo pueden hacer. Por su parte, la Blanca, otra de las representantes de la plataforma feminista, ha denunciado que, a pesar de la pandemia, los desahucios no se han detenido y ha lamentado que todavía siga vigente el toque de queda.