"El tiempo se acaba para el compromiso catalán". Este es el aviso que el jefe de internacional del Financial Times, David Gardner, ha enviado a Mariano Rajoy, en un artículo en el citado diario que emplaza al gobierno español a ofrecer un pacto fiscal "transparente" y "justo" para Catalunya, en vez de seguir tratando la Constitución "como una tablilla de piedra" y no como un documento que puede evolucionar y cambiar porque, de esta manera, "pasará el tiempo del sentido común".
Subrayando que, por sexto año consecutivo, los independentistas se han manifestado durante la Diada "sin romper ni un cristal", pero sí "amenazando con romper el orden democrático post-franquista"; Gardner advierte que los "separatistas radicales han suplantado a los gobernantes catalanes reafirmando el nacionalismo español de Castilla y dividiendo la izquierda en Catalunya y en todo el país".
Además, el jefe internacional del FT también recuerda que, en caso de que gane el sí en el referéndum, el resultado será vinculante aunque el Tribunal Constitucional haya decidido que es ilegal y lo haya prohibido bajo el amparo de la Constitución española. Eso, según su opinión, ha dividido tanto a Catalunya como España.
El argumento del aviso
Ahora bien. Después de repasar los diferentes acontecimientos que han ido sucediendo a lo largo de estos años relacionados con el procés y de explicar que los catalanes "se sienten una nación", Gardner empieza a llamar las cosas por su nombre y compara "la manifestación ciudadana cívica" del Onze de Setembre con el "espectáculo de las fuerzas de seguridad españolas" intentando perseguir todo aquello que tenga que ver con el 1-O.
Actuar de esta manera es "menos inflamatorio" que aplicar, por ejemplo, el artículo 155, pero aun así la situación continúa estancada porque Rajoy, a pesar de haber vuelto a apelar al diálogo, "no tiene claro que eso sea un problema político" y lo avisa de que si continúa por este camino "será aplastado por la sedición".
Un Rajoy (y un PP) que ya contribuyó en 2010 con que se incrementara el sentimiento independentista tumbando el Estatut y "negándose" a discutir al respecto todo este tiempo que ha estado en el poder. Precisamente por todo eso, Gardner avisa al gobierno español de que si Madrid continúa por este camino, se les pasará el tiempo. Quedan sólo dos semanas, recuerda.