La Fiscalía del Tribunal Supremo que dirige las tres investigaciones contra el rey emérito Juan Carlos I está pendiente de recibir una comisión rogatoria de Suiza para decretar el archivo de las diligencias abiertas, lo que obligará a pedir una prórroga, que vence el 17 de diciembre, y a cerrar la causa tras Navidad. Fuentes jurídicas han explicado que el equipo de fiscales que capitanea José Ignacio Campos remitió una comisión rogatoria a las autoridades suizas en las que solicitaban una serie de aclaraciones sobre actuaciones de los años 2015 y 2016.
Pese a que la Justicia suiza se ha comprometido a ser lo más diligente posible, es previsible que la documentación que remitan a los fiscales del Supremo obligue a pedir una nueva prórroga de las investigaciones contra el emérito, que caducan el 17 de diciembre. No obstante, las fuentes consideran que la información de dicha comisión difícilmente afectará a la decisión tomada, que no es otra que el archivo de las tres investigaciones, si bien sí tendrá consecuencias sobre los plazos procesales.
De esta forma, dado que la última prórroga de las actuaciones vence el 17 de diciembre, los fiscales del Supremo deberán solicitar una nueva prórroga de seis meses, pero que no agotarán puesto que esta petición es a hechos formales para esperar la última documentación de Suiza antes de archivar.
Respecto al proceso y de acuerdo al artículo 5 del Estatuto Fiscal, corresponderá al jefe del equipo de fiscales del Supremo, José Ignacio Campos, solicitar la prórroga a la fiscal general del Estado, Dolores Delgado, que validará esta solicitud siempre y cuando esté bien razonada y justificada, lo que es de esperar. Por tanto, el archivo llegaría siempre después del 17 de diciembre, pero no se prolongará más allá de unas semanas apuntando a enero como escenario más hipotético, han precisado las fuentes.
Hace unas semanas se conoció que el rey Juan Carlos podría viajar a España antes de que finalice este año, una vez que la Fiscalía tenía previsto archivar las tres investigaciones abiertas sobre sus fondos en el extranjero antes del 17 de diciembre, pero al dilatarse un poco más la causa, el escenario podría cambiar en tal caso.
El emérito no ve fundamentos
Ahora hace dos meses, Juan Carlos I reaccionó después que se hubiera hecho pública la comisión rogatoria de la Fiscalía del Tribunal Supremo enviada a las autoridades suizas. La defensa del rey emérito denunciaba que las imputaciones contenidas en la comunicación del ministerio fiscal y en las que se aprecian "indicios de criminalidad" se realizaban "sin apoyatura alguna y son carentes de la más mínima justificación". El abogado Javier Sánchez-Junco afirmaba que tales afirmaciones "conculcan de manera evidente el principio de presunción de inocencia que ampara a todo ciudadano", ya que se traslada a la opinión pública "valoraciones y consideraciones que perjudican gravemente" al anterior jefe del Estado.