La Fiscalía de Madrid ha remitido a la de la Audiencia Nacional la denuncia presentada por el presidente de la Escuela Nacional de Entrenadores de Fútbol en España, Miguel Galán, contra el presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, por el beso forzado que dio a la jugadora de la selección española femenina Jenni Hermoso, ya que entiende que el asunto, como se produjo fuera de territorio español, es de su competencia. En un escrito, la fiscal, Ana María Galdeano, indica que la denuncia presentada por Galán, fue recibida el pasado 23 de agosto y que en ella "se relata hechos que podrían, si procede, ser constitutivos de un delito de agresión sexual". Ahora será la Fiscalía de la Audiencia Nacional la que decida si admite la denuncia por agresión sexual.
Hasta el momento, la Fiscalía General del Estado (FGE) ha recibido cuatro denuncias que piden que se investigue a Rubiales, quien acumula frentes abiertos en el Consejo Superior de Deportes y el reproche público de varias formaciones políticas, así como de la misma Hermoso, que la noche del miércoles emitió un comunicado a través de su sindicato FUTPRO en el cual pedía "medidas ejemplares" para el presidente de la RFEF.
Rubiales no dimite como presidente de la RFEF
Contra todo pronóstico, Luis Rubiales no ha dimitido como presidente de la RFEF. "No voy a dimitir, no voy a dimitir, no voy a dimitir", así lo ha dejado claro este viernes a partir de las 12:00 horas ante los miembros de la asamblea general extraordinaria de la RFEF. Donde ha dado explicaciones por sus actuaciones durante la final del Mundial femenino, tanto del beso forzado que le dio a Jenni Hermoso, como por el momento que fue captado por las cámaras donde se tocaba sus partes íntimas en el palco para celebrar la victoria de la selección junto a la reina Letizia, la niña Sofía, de 16 años, y el presidente de la FIFA, Gianni Infantino.
Rubiales ha asegurado que "se está ejecutando un asesinato social" hacia su persona, puesto que considera que se lo está "tratando de matar". En cuanto al beso a Jenni Hermoso ha defendido que fue "espontáneo, mutuo y consentido". "Aunque se esté vendiendo otra cosa, no hay deseo y no hay posición de dominio. Aunque se esté vendiendo otra cosa en muchos de los medios, tanto los que están dominados o vendiendo homenaje al señor Tebas, como los que están rindiendo homenaje al falso feminismo, que es una gran lacra en este país. Fue un beso espontáneo, mutuo, eufórico y consentido, que esta es la clave, esta es la clave de todas las críticas", ha explicado Rubiales.