Se trata de uno de los pilares más antiguos que la juventud ha tenido para aferrarse al catalanismo. La Federación Nacional de Estudiantes de Catalunya cumple este mes de abril 90 años. A pesar de haber pasado por muchos momentos convulsos a nivel político y social, la FNEC siempre ha tenido la misma razón de ser. "Nació y todavía existe por el hecho nacional", explica en declaraciones a ElNacional.cat su actual presidente, Ferran Piqué. El próximo 26 de abril el sindicato celebrará su nonagésimo aniversario con un acto en el edificio central de la Universitat de Barcelona, y servirá para reivindicar su vigencia como asociación de estudiantes y su legado histórico. Se trata, además, de una cantera importantísimo de líderes del Procés. De la FNEC han salido políticos como Oriol Junqueras y Quim Forn, pasando por David Madí, Damià Calvet, Oriol Pujol, Ramon Tremosa, Jaume Padrós, Joan Capdevila o Antoni Molons, entre otros.
Si de alguna cosa puede sacar pecho Piqué -actual estudiante de Derecho, antes de Empresariales- es que preside una federación que ha tenido siempre un fuerte carácter transversal. "Se trata de una asociación de estudiantes que quiere ser útil para el país, y siempre hemos considerado que una manera de serlo es no convertirse en la pata de ningún cartel", afirma en declaraciones a este medio; además de añadir que "si empezamos a generar rivalidades políticas en la universidad en motivo de las siglas, seguro que no nacerá nada positivo para el país". La cultura y la lengua han sido siempre caballos de batalla de la federación. Si ya lo eran hace noventa años, todavía con más razón lo son en un contexto en el cual el catalán va de bajada.
Historia
El intelectual independentista Josep Maria Batista i Roca inspiró el nacimiento de la FNEC en 1932. Faltaban pocos años para que estallara la Guerra Civil, un conflicto bélico que, según la federación, siempre fue "una guerra por la liberación de Catalunya. El conflicto se llevó muchos estudiantes y militantes hombres del sindicato en el frente, hasta el punto que el año 1938 el sindicato solo estaba organizado por mujeres. La derrota final y la llegada del franquismo supusieron la ilegalización de la FNEC, cosa que comportó el exilio de muchos de sus miembros.
Estudiantes en el exterior del edificio central de la Universitat de Barcelona, esquina Gran Via con calle Balmes; con carteles animando a los estudiantes a alistarse a las brigadas de la UGT, durante la Guerra Civil
No obstante, el sindicato siguió trabajando desde el exilio y la clandestinidad. La FNEC se planteó entonces como un frente de resistencia estudiantil a la universidad franquista y su Sindicato Español Universitario. En 1966, la FNEC se integró en el Sindicato Democrático de Estudiantes de la Universidad de Barcelona, cosa que supuso un paréntesis en la existencia del sindicato nacionalista. Veinte años más tarde, en 1986, un grupo de estudiantes jóvenes refunda la FNEC como sindicato independiente, con el objetivo de recuperar la esencia y contar con un sindicato que lidere el combate nacionalista en las aulas.
Acto de la FNEC en la Universitat de Barcelona, con la presencia del president Lluís Companys
¿Y ahora?
Actualmente la FNEC convive con otras asociaciones estudiantiles como es, por ejemplo, el Sindicato de Estudiantes de los Países Catalanes (SEPC), un sindicato con "vinculación directa" con la CUP, señala a Piqué. Según el líder actual de la FNEC, esta federación puede presumir de un "carácter transversal" durante toda su existencia. "Siempre hemos conseguido que las diversas sensibilidades del catalanismo se sientan incluidas", afirma en su conversación con este diario. Aunque durante el Procés el SEPC se ha convertido en el sindicato de estudiantes más mediático, la FNEC insiste en destacar sus noventa años de existencia, además de su voluntad "de aglutinar a todo el mundo"; independientemente de sus ideas, siempre que sea desde el independentismo catalán.
Piqué señala que para la FNEC, el Procés ha sido uno de los muchos momentos convulsos que ha vivido el sindicato durante su historia. "Siempre hemos estado a la vanguardia de la defensa de los grandes cambios y de los intereses de la nación, y así lo hemos visto cuándo tuvo lugar la Huelga de Tranvías, la Caputxinada o el 1-O", afirma. "Y nada de eso es comparable con tener que vivir en la clandestinidad por culpa del franquismo o tener que ir al frente durante la guerra", asegura Piqué.
En los últimos meses ha sido bastante importante un debate relacionado con el uso de la lengua catalana en las aulas universitarias del país. Son muchos los catalanes que se han encontrado con que su profesor ha empezado a impartir una materia en lengua castellana por el simple hecho de que algún alumno manifestara que no entiende el catalán; aunque al currículum se especificara que se impartiría en la lengua de Catalunya. Según Piqué, si se ha llegado a una situación como la actual -de denuncias constantes en las redes sociales- es gracias al movimiento estudiantil que ha conseguido visibilizar situaciones como estas.
El actual presidente de la FNEC considera también que uno de los grandes éxitos de su sindicato, juntamente con otros movimientos estudiantiles, ha sido el de conseguir colocar rectores en las universidades que estuvieran a favor del referéndum del 1-O y "que hayan podido explicar en el exterior la situación que se vive en Catalunya". Asimismo, también señala que desde la FNEC se ha intentado que exista una mejor conciliación entre la vida laboral y los estudios; así como, por ejemplo, poder alargar los horarios de las bibliotecas. La federación llegará este mes de abril a sus noventa años en un momento en que se quiere modificar la Ley de Política Lingüística para que el castellano también pueda ser vehicular. Una idea "inaceptable" fruto de lo que dicen "los tribunales castellanos", señala Piqué.