La expresidenta del Parlament Carme Forcadell y la consellera Dolors Bassa ya están en Catalunya. Los dos presas políticas han llegado a la prisión de Puig de les Basses, en Figueres, pocos minutos más tarde de las cuatro y cuarto de la tarde. Han salido de la prisión madrileña de Alcalá Meco a primera hora de esta mañana, de donde han ido directamente hacia el Empordà, con una parada técnica a la prisión de Zuera de Zaragoza al mediodía para dejar a una prdsa. A diferencia de Oriol Junqueras, Raül Romeva, Jordi Sànchez y Jordi Cuixart, ellas no han hecho parada para pasar la noche.
El presidente del Parlament, Roger Torrent, ha visitado a Forcadell y Bassa esta tarde durante dos horas, una vez ya estaban en la cárcel. También se han acercado la portavoz del Govern, Elsa Artadi, y los consellers Laura Borràs i Chakir El Homrani.
El traslado ha ido a cargo de una furgoneta de la Guardia Civil, que ha hecho el trayecto entre las prisiones de Alcalá Meco y Puig de les Basses. A diferencia de los presos que han ido a Lledoners (Sant Joan de Vilatorrada), los Mossos no han participado del operativo de traslado. Allí han sido recibidas por trabajadores de la cárcel que, a título personal, también les querían dar la bienvenida.
El dispositivo de la Guardia Civil ha sido despedido por manifestantes independentistas con gritos de "fuera las fuerzas de ocupación".
Forcadell y Bassa ingresarán en el único módulo de mujeres de la prisión. Puig de les Basses es una prisión relativamente nueva. Fue inaugurada en el 2014 y tiene una superficie de unos 61.000 metros cuadrados. Consta de 17 edificios, entre los cuales enfermería, área de deportes y una zona de servicios donde se realizan talleres productivos. Tiene una capacidad para 922 internos y actualmente hay 734. En el módulo de mujeres hay 35 internas.
Todos ellos entrarán en la rutina de los internos preventivos, que es la misma que la de los internos que cumplen condena. "Lo único que cambia es que no participan en actividades especializadas de intervención en un delito, ya que no están penados", dice Serveis Penitenciaris.
Entre lazos amarillos
Carme Forcadell y Dolors Bassa han llegado este miércoles por la tarde a la prisión figuerense entre lazos amarillos. Desde que se supo su destino, miembros locales de los CDR llenaron la carretera de acceso a Puig de les Basses de la insignia que reivindica la libertad de los presos políticos. También han llenado el asfalto de pintadas amarillas que reclaman la liberación.
Para las siete de la tarde, ante el centro penitenciario, hay una concentración de bienvenida convocada por el ANC, Òmnium Cultural y la Associació Catalana de Drets Civils, que reúne a los familiares de los presos. En el acto intervendrá a la hermana de Dolors Bassa, Montserrat Bassa; el vicepresidente de la ANC, Josep Cruanyes, y la miembro de Òmnium, Clàudia Pujol.
Régimen de visitas
Según Justicia, los presos políticos podrán ver a sus familias el mismo número de horas que hasta ahora.
Como los 6.712 internos en régimen ordinario que hay en los centros de la Generalitat, los que tienen niños de menos de 10 años podrán hacer comunicaciones de convivencia, en la que entran los niños y un adulto acompañador. En este caso se trata de una comunicación mensual de 90 minutos. Ahora hacían una de tres horas al trimestre.
En relación con las comunicaciones por locutorio o cristal con familiares y amigos, tendrán el mismo tiempo: 40 minutos a la semana, que se pueden distribuir en dos encuentros de veinte minutos, sábado y domingo, o en una sola, uno de los dos días del fin de semana.