La presidenta del Parlament de Catalunya, Carme Forcadell, ha pedido al Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC) que eleve al Tribunal de Justicia de la Unión Europea la admisión a trámite de la última querella de la Fiscalía por haber permitido que la cámara aprobara la ley del referéndum. La defensa de Forcadell pide el pronunciamiento de la justicia europea si el TSJC no admite su recurso directo contra esta admisión a trámite. También ha solicitado la recusación de los cinco miembros de la Sala de lo Civil y Penal del TSJC por su "interés directo o indirecto" en la causa.
En un escrito de 35 páginas, el abogado de Forcadell y de la secretaria primera de la Mesa, Anna Simó, argumentan que "el TC está deslegitimado a nivel internacional y su independencia y transparencia cuestionada", y que si el TSJC "no lo cree así, es una simple estrategia de salvaguardia de su propia actividad a la hora de dar cumplimiento de las órdenes del TC".
Forcadell y Simó piden el archivo de la causa contra ellas y defienden que se limitaron a tramitar y permitir el debate y votación de las iniciativas parlamentarias, sin entrar en su contenido político. Afirman que el Tribunal Constitucional no puede violentar las normas de funcionamiento interno del Parlament ni decidir qué se vota.
Inviolabilidad
El escrito insisten el principio de inviolabilidad parlamentaria de Forcadell y Simó. "La inviolabilidad parlamentaria es una garantía que se lesiona cada día que se mantiene un procedimiento abierto contra un diputado" en ejercicio de sus funciones, sostienen. Citan varias sentencias del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, del Tribunal de Justicia de la Unión Europea y del Tribunal Constitucional. También varios juristas que vinculan la inviolabilidad parlamentaria con la garantía de la libertad de expresión y del buen funcionamiento de las instituciones democráticas y de la separación de poderes.
Recusación
En un segundo escrito, el letrado de Forcadell pide la recusación de cinco magistrados de la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justícia de Catalunya, por su interés directo o indirecto en la causa por haber participado en la instrucción o juicio de la causa en una instancia anterior. Se trata de los magistrados José María Barrientos, presidente del TSJC; Carlos Ramos; Mercedes Armas, que instruye la causa contra el Govern, y Maria Eugènia Alegret, instructora de la causa contra Forcadell.
El abogado se hace suyos los argumentos esgrimidos por el president de la Generalitat, Carles Puigdemont, y el conseller de Presidència, Jordi Turull, para pedir también la recusación de magistrados del TSJC, a causa de su sistema de elección, la poca independencia judicial española denunciada por organismos internacionales y las manifestaciones públicas de algunos magistrados contra el proceso soberanista catalán.