El exconseller de Interior encarcelado, Joaquim Forn, ha anunciado este lunes que contempla denunciar al coronel de la Guardia Civil Diego Pérez de los Cobos y al teniente coronel Daniel Baena por haber dado falso testimonio durante el juicio del 1-O. Según ha explicado en una entrevista en RAC1, considera que la absolución del mayor Trapero y la cúpula de Interior por parte de la Audiencia Nacional acredita que "la actuación de los Mossos durante el 1-O se puede considerar razonable y avala la prudencia en el uso de la fuerza o la mediación como modelo de gestión" y que, por lo tanto, pone en evidencia las declaraciones de los jefes de la Guardia Civil.
"La sentencia de la Audiencia es un varapalo en toda regla en las tesis de la Fiscalía que se sostienen en los atestados de la Guardia Civil y el Cuerpo Nacional de Policía. Creo que ahora es el momento de estudiar si hay base jurídica para actuar contra estas personas, si pueden haber incurrido en un delito de falso testimonio y si hay contradicciones en sus declaraciones en el Supremo y en la Audiencia Nacional", ha explicado.
Foto: El coronel Diego Pérez de los Cobos en una imagen de recurso / ACN
Forn ha declarado que "la sentencia de la Audiencia Nacional es una prueba más que el juicio en el Supremo fue político, y que todos los procesados debíamos salir con unas condenas altas para que nos sirviera de escarmiento y al mismo tiempo de advertencia para el futuro".
Forn presentará recursos
Por este motivo, el exconseller, como ya anunció, presentará hoy mismo un recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional por las contradicciones en las sentencias. De hecho, durante el juicio en el Supremo, en la fase de presentación de las cuestiones previas, su abogado, Xavier Melero, ya alegó la necesidad de no escindir la causa de Forn de la cúpula de los Mossos para evitar pronunciamientos contradictorios, una petición que fue desestimada.
Además, el entonces conseller de Interior también ha explicado que estudiarán la posibilidad de presentar un recurso extraordinario delante del Supremo y a la justicia europea.
"La sentencia de Trapero desmiente la instrucción de la jueza Carmen Lamela y pone en evidencia, una vez más, que esta se basaba exclusivamente en los atestados de la Guardia Civil y el Cuerpo Nacional de Policía. Unos informes absolutamente sesgados, faltos de cualquier objetividad y que tenían como objetivo apuntalar el relato de la fiscalía. Cualquier declaración o documento que se apartaba de este relato era automáticamente ignorado", argumenta.