El diario Frankfurter Allgemeine, considerado el más influyente de Alemania, ha explicado la reforma laboral que ha pactado el gobierno de Pedro Sánchez con los agentes sociales, y ha revelado el malestar existente por esta cuestión entre los socios de gobierno, sin entrar en el recelo de cómo se lo miran los aliados parlamentarios.

"La reforma ha sido objeto de una fuerte disputa dentro de la coalición de gobierno. La ministra de Economía, Nadia Calviño, que es muy apreciada en la UE en Bruselas, no quería ir tan lejos como la ministra de Trabajo, la comunista Yolanda Díaz; Calviño no quería poner en peligro la recuperación de la economía, que el coronavirus ha situado en la peor crisis desde la Guerra Civil," ha indicado.

Requisito europeo

 

Según el Frankfurter Allgemeine, el acuerdo sobre la reforma laboral, que está pendiente de ser votado en el Congreso de los diputados, es importante para alcanzar los objetivos de reforma que considera la UE para que España pueda recibir más de 70.000 millones de euros en subvenciones a fondo perdido del fondo de reconstrucción covid.

El diario deja muy mal parado el actual modelo de contratos español, centrado en una economía donde el turismo tiene un peso muy importante. "Más de una cuarta parte de los contratos laborales en España son de duración determinada. En particular, los jóvenes españoles sufren contratos en cadena precarios, y a menudo mal pagados. Muchos cambian de un contrato de basura a otro", resume.

"Cómo quiere reforzar España los derechos de los trabajadores" se pregunta el Frankfurter

Añade que el entonces presidente español, Mariano Rajoy, impulsó esta política de contratos para salir de la crisis del 2008, y efectivamente redujo el paro pero con un coste laboral muy alto. "Al flexibilizar la ley laboral y de negociación colectiva, el anterior gobierno conservador de Mariano Rajoy creó centenares de miles de puestos de trabajo y volvió a poner la economía en marcha en el 2012 después de la gran crisis financiera. Pero el precio que pagaron muchos españoles por eso fueron los sueldos bajos, y a veces más del 60 por ciento de los contratos eran de duración determinada", apunta.

Según el diario, cuando se apruebe la reforma laboral los contratos de corta duración pasarán a ser excepcionales. "En el futuro sólo habrá dos tipos de contratos temporales: los contratos estructurales, y los de formación. Por ejemplo, si se necesita más personal con poca antelación antes de Navidad o a la agricultura. El uso de trabajadores temporales está más estrictamente regulado, los contratos de duración determinada se controlan más de cerca y se sancionan los abusos. Al mismo tiempo, los sindicatos tienen más derechos en la negociación", resume.

Sánchez ha aprovechado hoy la rueda de prensa de balance del año, para reclamar "sentido común" al conjunto de grupos parlamentarios en el Congreso de los Diputados, para poder aprobar la reforma laboral. Actualmente, no tiene el apoyo suficiente en el Congreso.